En un procedimiento abreviado, el juzgado de garantía de Pozo Almonte acogió la solicitud de la Fiscalía del Tamarugal y condenó a los tres militares bolivianos detenidos en septiembre del año pasado en Colchane por porte ilegal de arma de fuego prohibida.
En la audiencia, el fiscal jefe del Tamarugal, Hardy Torres, acusó verbalmente a los imputados señalando que el martes 7 de septiembre de 2021, siendo las 22:00 horas aproximadamente, carabineros de la subcomisaría de Colchane fueron alertados por lugareños que en el sector del poblado de Pisiga Carpa, en las cercanías del límite fronterizo, habían sido vistos militares bolivianos armados en territorio chileno.
Personal policial fue a verificar la situación y cerca de la medianoche, en el sector del Salar de Coipasa, encontraron un vehículo no militar con los imputados Jaime Hervas Fuentes, Nijer Ponce Flores y José Bautista Carvajal en su interior, vestidos con ropa del ejército boliviano, quienes mantenían dos fusiles, dos pistolas y numerosas municiones.
El Fiscal dio cuenta de las múltiples pruebas obtenidas durante la investigación, como los testimonios de los carabineros que detuvieron a los acusados, la georreferenciación de donde ocurrieron los hechos, confirmando que era territorio chileno, y los informes periciales fotográficos, planimétricos y balísticos.
Considerando que a los acusados les beneficiaban las circunstancias atenuantes de irreprochable conducta anterior y colaboración sustancial en el esclarecimiento de los hechos, la Fiscalía solicitó la pena de 4 años de presidio para cada uno de ellos por el delito de porte ilegal de arma de fuego prohibida.
Sin embargo, el juez de garantía decidió sustituir la pena solicitada por la expulsión del territorio nacional, al que no podrán ingresar por el plazo de 10 años. Además se decretó el comiso de las armas y municiones incautadas.