Las isapres abiertas sumaron su quinto año consecutivo de pérdida de afiliados en 2024, acumulando una disminución de 786 mil beneficiarios desde 2019, lo que representa un 23,5% menos respecto al total registrado hace cinco años.
Según cifras de la Superintendencia de Salud, el año pasado 157 mil afiliados dejaron el sistema, reduciendo la cifra total a 2.559.157 beneficiarios —incluyendo cotizantes y cargas— al cierre de diciembre. Esto equivale a una baja del 5,8% en comparación con 2023 y sitúa el número de afiliados en el nivel más bajo desde noviembre de 2006.
La fuga de beneficiarios comenzó en febrero de 2020 y se ha mantenido de forma ininterrumpida durante 59 meses consecutivos. A finales de 2019, las isapres abiertas registraban 3.345.512 afiliados, cifra que ha experimentado un constante descenso.
Si bien la salida de usuarios se desaceleró en 2024 en comparación con 2023, la pérdida de afiliados sigue siendo significativa y refleja la crisis persistente que atraviesa el sistema de salud privado en Chile.
