Este viernes la justicia francesa definió dejar a Nicolás Zepeda en prisión preventiva por la desaparición y presunto homicidio de la ciudadana japonesa Narumi Kurosaki.
El joven se encontraba con arresto domiciliario total en su vivienda de Viña del Mar desde el 26 de junio antes de su detención, efectuada este miércoles en la noche por la PDI, y posteriormente fue extraditado la mañana de ayer jueves.
La ficalía francesa exigía que Zepeda sea juzgado bajo la ley francesa y que se le aplique la medida cautelar solicitada, mientras que el imputado chileno se mostró dispuesto a cooperar en el proceso judicial y reafirmó su inocencia.
El chileno será trasladado a la cárcel de Besançon para cumplir la medida cautelar.
De acuerdo a la carpeta investigativa, la ciudadana japonesa desapareció en diciembre del 2016, después de que el día 4 de ese mes fuera captada junto a Zepeda por cámaras de seguridad de un restaurante.
Tres horas después viajaron a un pueblo al sur de Besançon, cuando la víctima fue vista por última vez. También se estableció que Zepeda compró cinco litros de combustible para estufa, un detergente con cloro y una caja de fósforos días antes de viajar con Kurosaki.
