Con 35 votos a favor y 11 en contra, la Sala del Senado aprobó la idea de legislar sobre el proyecto de reforma constitucional que busca introducir cambios al sistema político y electoral. Entre las medidas más destacadas está la pérdida del escaño para parlamentarios que renuncien al partido por el cual fueron elegidos.
El proyecto será remitido ahora a la Comisión de Constitución del Senado para su análisis en particular. Se fijó el 6 de marzo como plazo para la presentación de indicaciones.
Quienes respaldaron la iniciativa destacaron la necesidad de enfrentar la crisis de fragmentación en el Congreso, que ha dificultado la gobernabilidad y la aprobación de agendas gubernamentales. Según los senadores favorables, fortalecer los partidos políticos y establecer un sistema más ordenado es clave para garantizar acuerdos y estabilidad política.
La senadora por Tarapacá y coautora del proyecto, Luz Ebensperger, señaló que “es un avance muy importante. Expertos han señalado que nuestro sistema político cumplió su ciclo”.
La parlamentaria de la UDI agregó que el objetivo del proyecto es facilitar acuerdos oportunos que permitan responder a las necesidades urgentes de los chilenos.
Por otro lado, los detractores señalaron que el proyecto no aborda problemas estructurales. Manifestaron su rechazo a la implementación de un umbral del 5% de votos para partidos, argumentando que podría afectar la representación de candidaturas independientes y excluir a parlamentarios con alta votación popular si sus partidos no alcanzan dicho umbral. También criticaron la decisión de avanzar en este tema cerca de un proceso electoral, calificándola como inoportuna.
La discusión en particular permitirá ajustar el texto, considerando las observaciones planteadas en ambas posiciones, en un esfuerzo por mejorar el sistema político del país.
