Ante la Corte Marcial, el abogado de uno de los oficiales procesados dijo que esta práctica era habitual. CDE planteó que no por eso deja de ser delictivo.
Mientras la ministra en visita Romy Rutherford procesaba el martes al general (R) John Griffiths, la segunda autoridad del Ejército, como eventual autor de reiterados fraudes al Fisco en la arista del desfalco a la institución denominada “Empresas de Turismo”, la Corte Marcial ratificaba el procesamiento de los dos primeros oficiales involucrados en este caso: los coroneles (R) Sergio Vásquez y Rodolfo Hidalgo.
Fue en esta instancia cuando la defensa de uno de los inculpados, el coronel (R) Vásquez, entregó a los ministros de la Corte Marcial los antecedentes que daban cuenta de que la cuestionada práctica, en la cual los oficiales compraban pasajes con cargo a la institución y luego cambiaban los destinos para vacacionar o recibían reembolsos, era algo habitual.
“Entre 2009 y 2015 (período que indaga la ministra Rutherford) salieron fuera del país 1.503 soldados: 348 generales, 892 coroneles y más de 300 suboficiales y clases. Este número es exacto, porque está extraído de los decretos supremos que en cada caso los revisé, firma el ministro de Defensa por orden del Presidente, disponiendo las comisiones de servicio en el exterior”, dijo el abogado de Vásquez, Luis Valentín Ferrada.
Estos detalles, indicó Ferrada, dan cuenta de que “todas estas personas han ocupado exactamente el mismo sistema que hoy se reprocha, porque era la única forma de operar. Todos (contaban) con el mismo pasaje en Economy One Way, que era un cupo para los efectos de la tarifa y que cada una de estas personas negociaba después con la agencia de turismo, que eran licitadas por el Ejército, para precisamente mover todo este sistema”.
El abogado agregó que “cuando uno ve los nombres, eran coroneles en 2015 que se sabe dónde están ahora, en el alto mando (…). Ahora, hay que ver a las 1.500 personas que actuaron del mismo modo”. Y añadió que eran prácticas que realizaron todas las FF.AA.
En contraparte a Ferrada, la abogada del Consejo de Defensa del Estado (CDE), María Inés Horvitz, criticó en esa misma audiencia del martes la argumentación de la defensa de Vásquez, y sostuvo que no porque fuera una práctica habitual significa que no sea delictiva, que se deba tolerar y que no se persiga. Planteó que eso es lo que está pasando con la corrupción en ámbitos institucionales opacos y donde no hay fiscalización ni controles efectivos. Por esto, señaló, es tan importante perseguir estos hechos.
Agregó Horvitz que si la Contraloría en sus auditorías -tal como lo señaló Ferrada en la audiencia- no encontró nada irregular en este ámbito, fue porque todo este mecanismo de viajes se hacía a través de facturas ideológicamente falsas y que esto se tramó entre las agencias de viajes y el beneficiario, es decir, el oficial que era destinado a una comisión de servicio.
Horvitz, además, pidió el auto de procesamiento por fraude al Fisco de los dos exjefes de la sección Pasajes y Fletes del Comando de Personal del Ejército entre 2011 y 2017. Según la abogada, eran quienes tenían que verificar las tablas de los valores por tramo, las cotizaciones y evitar lo ocurrido.
En paralelo a la indagatoria que lleva la ministra Rutherford, el fiscal Centro Norte, José Morales, está pesquisando un presunto lavado de activos en relación al papel que habrían jugado las agencias de turismo que facilitaron los viajes cuestionados a los oficiales del Ejército. Una de las empresas indagadas es la agencia Latrach, de propiedad de Victoria Latrach, quien hoy es representada por el exfiscal nacional Sabas Chahuán y Raimundo Hales.
Gobierno
El ministro de Defensa, Alberto Espina, dijo ayer en el Congreso que a través de la Contraloría se están investigando todas las áreas sensibles de las tres ramas de las FF.AA. Señaló que se está viendo “todo lo relacionado con los recursos de la Ley del Cobre, adquisiciones y compras, jubilaciones y pensiones, incluso intermediarios. Este es un caso muy complejo que puede extenderse a otras personas”.
Descartó que el comandante en jefe del Ejército, general Ricardo Martínez, estuviera relacionado: “Los hechos ocurrieron muchos años atrás, el comandante asumió el 10 de marzo de este año, quien no solo de palabra, sino en todos los planos, se ha relacionado con eficiencia y disciplina”.
Fuente: latercera.com