El presidente Sebastián Piñera encabezo un acto en La Moneda en la que hizo algunas “reflexiones” y recordó “el 12 de marzo de 1990, cuando recién los chilenos y chilenas habíamos recuperado de forma ejemplar nuestra democracia. Ese día Patricio Aylwin dijo ‘nunca más’, nunca más atropellos a la dignidad humana, y esa palabras deben estar muy presentes en nuestras almas y nuestros corazones”.
En su alocución, el Presidente justificó su gestión en la materia y centró su discurso en aplicar una ley del empate en los casos de víctimas durante el estallido social, tanto de las violaciones de los derechos humanos, como de la violencia callejera.
Así, en tono conciliador con todos los sectores, valoró el trabajo de instancias como el Instituto Nacional de Derechos Humanos y la Defensoría de la Niñez, que han tenido una mirada crítica del actuar del Estado.
Pero a la par alabó la gestión de Carabineros, dando todo su respaldo a la institución que encabeza Mario Rozas. En tal sentido, aseguró que “queremos terminar con todos los mitos y falsas dicotomías. Cuando se resguarda el orden público, se protegen los derechos humanos”.
“Nuestra posición es fuerte y clara: En primer lugar un compromiso absoluto sin ninguna ambigüedad, sin ninguna duda con el respeto de los DD.HH. de todos siempre, pero eso no es suficiente, por eso que también hay que tener una actitud fuerte y clara que cualquier atropello que se cometa a los DD.HH., debe ser investigada por la Fiscalía y debe ser conocido, juzgado y cuando corresponda sancionado por los tribunales de justicia”, aseguró.
A modo de balance, el Mandatario dijo que en las últimas semanas “hemos tenido que reconocer y lamentar la muerte de 24 compatriotas y varios miles han sufrido algún tipo de lesiones, algunos de ellos muy graves”.
“Quiero expresar mis condolencias, mi solidaridad y reiterar compromiso con la verdad para quienes sufrieron consecuencias de la violación a los DD.HH.”, dijo el Jefe de Estado, quien luego se refirió por primera vez en concreto a dos de los casos más sensibles víctimas de la acción de Carabineros. “Estoy pensando en personas como Gustavo Gatica y Fabiola Campillay”, quienes perdieron la visión de ambos ojos, sostuvo.
Pero al mismo tiempo mencionó al “cabo segundo de Carabineros Sebastián Artigas, quien recibió un balazo en Pudahuel” y las carabineras quemadas con molotov en Plaza Baquedano, María José Hernández y Abigail Catalina Aburto. “Y junto a ellos a miles de víctimas, tanto civiles como de nuestras Fuerzas de Orden y Seguridad”, dijo equilibrando la balanza.
Finalmente, Piñera indicó que “vamos a hacer todos los esfuerzos para aprender las lecciones de estas siete semanas”, acotando que la experiencia de las últimas semanas “nos obliga a reforzar el perfeccionamiento de instrumentos, mecanismos e institucionalidad, y a la vez avanzar para que en Chile tengamos una verdadera cultura de derechos humanos”, tal como adelantó en la cadena nacional del lunes cuando presentó la agenda antiabusos.