Más de tres toneladas de productos agropecuarios de alto riesgo fito y zoosanitario fueron interceptados por personal de Carabineros del retén ubicado en las cercanías del Control Aduanero de Quillagua. La mercadería que fue entregada al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Tarapacá para su análisis y destrucción, pretendía ser comercializado en las ferias de Calama en la región de Antofagasta.
El cargamento quedó al descubierto en momentos en que Carabineros del retén de Quillagua en un control carretero de rutina, se percató de la presencia de un camión que con las luces apagadas y aprovechando la oscuridad de la noche, intentaba burlar el control aduanero ubicado en el sector.
Al revisar el interior del vehículo encontraron un total de 24 sacos de choclos frescos, 18 cajas de plátanos, 19 sacos de papas y 14 sacos de papa camote, además de otros productos como quesos frescos y carnes de llamo, los cuales eran transportados sin ningún certificado sanitario, ni cadena de frío.
“Junto con agradecer la labor comprometida realizada por Carabinero, señalar que nuevamente estamos en presencia de un importante decomiso de productos de origen animal y vegetal, donde encontramos frutas frescas de alto riesgo, como mangos, que al no ser internados de manera legal al país, representan un peligro dado que pueden ser portadores de plagas como la mosca de la fruta”, agregó Alfredo Fröhlich, Director Regional del SAG Tarapacá.
En este sentido, la autoridad indicó que continuarán reforzando el trabajo de fiscalización del Servicio, “el cual si bien se desarrolla de manera permanente durante todo el año, sabemos que dada la alta demanda de productos por temporada estival, es un deber reforzar nuestro trabajo de vigilancia para evitar que productos que pueden ser portadores de plagas o enfermedades que afectan la agricultura ingresen a nuestra región, o que incluso, puedan ser transportados hacia otras regiones del país”, acotó
Las casi 3 toneladas de productos agropecuarios habrían sido internados al país por pasos no habilitados en la frontera. Actualmente se encuentra en proceso de análisis en los laboratorios del SAG con el propósito de detectar la posible presencia de estados inmaduros de plagas ausentes, para posteriormente proceder a su destrucción.