El Fiscal Nacional, Jorge Abott, sostuvo esta mañana que serán “extremadamente severos” en situaciones de posible
corrupción en las compras por parte de Estado, cuyos recursos están destinados para ayudar a las personas que enfrentan la crisis generada por la pandemia.
Ejemplificó la situación, el caso de las “canastas familiares” en Arica y Parinacota, donde el Ministerio Público se hizo parte para investigar las eventuales irregularidades en la compra de 22.500 canastas por parte del gobierno regional de Arica y Parinacota, una iniciativa cuyo valor superaba los 900 millones de pesos, y que estaba destinada a las familias vulnerables de la región.
Abbott manifestó que, como institución, les parece indignante que esos recursos que van en beneficio de personas que requieren la ayuda se resten, afirmando que el organismo que dirige actuará con rapidez para realizar las indagatorias respectivas.
Recordó que, en el caso de Arica, ya se inició una indagatoria por la compra de cajas de alimentos que hizo la intendencia regional a una empresa que no tiene giro para dicho rubro.
Finamente, el persecutor nacional dijo que la corrupción, especialmente en estos tiempos, es reprochable.
Ayer, el Consejo de Defensa del Estado anunció también que se hará parte en la investigación del proceso, aunque sólo será requiriendo algunas diligencias en la primera etapa.
La Contraloría Regional, en tanto, instruyó realizar un sumario administrativo en la Intendencia Regional y en el Gobierno Regional y en los servicios públicos pertinentes, a objeto de determinar la existencia de eventuales responsabilidades administrativas en este proceso de compra.