Las autoridades sanitarias de Irlanda recomendaron la suspensión temporal a partir de este domingo de la aplicación de la vacuna de AstraZeneca en ese país como medida de “precaución”, tras detectarse nuevos casos de coágulos sanguíneos en personas que han recibido ese preparado.
La recomendación dada por la Comisión nacional de asesoramiento de inmunización (NIAC) en Irlanda se basa en nuevos datos “proporcionados por la Agencia del Medicamento Noruega ayer por la tarde y tras mantener conversaciones con el Organismo regulador de productos sanitarios (HPRA)”.
El responsable médico adjunto de Irlanda, Ronan Glynn, explicó que la NIAC recibió más información de un “informe de la Agencia de Medicamentos de Noruega (informando) de cuatro nuevos incidentes de coágulos de sangre graves en adultos tras ser inoculados con la vacuna contra el COVID-19 de AstraZeneca”.
Glynn aclaró que “no se ha concluido que haya ningún vínculo entre la vacuna contra el COVID-19 de AstraZeneca y estos casos”. Pese a ello, y a la espera de más información, se recomendó aplazar el uso de la fórmula de la firma anglosueca.