Este viernes la Corporación Nacional Indígena (CONADI) y el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) de Tarapacá, firmaron un convenio colaborativo para implementar el mejoramiento del riego en los sectores productivos agrícolas de la región. Este acuerdo involucra un presupuesto de $200.000.000 pertenecientes al fondo de Tierra y Agua de CONADI, los cuales serán transferidos a INDAP para al fortalecimiento de la actividad productiva regional.
El objetivo principal es el mejoramiento de la infraestructura productiva y de riego, vinculada a sistemas productivos desarrollados bajo ambientes controlados, labor que será complementada con la entrega de asesoría técnica especializada, dirigida a los agricultores beneficiarios.
Al respecto, el subdirector norte de CONADI, Eleodoro Moscoso comentó que “la firma del convenio tiene como propósito entregar mejorías a los agricultores indígenas de la provincia del Tamarugal, además, como CONADI hemos dispuesto de un presupuesto de $200.000.000 del fondo de Tierra y Agua de nuestro servicio, que serán traspasados a INDAP para esta tarea.”
Por su parte, el director de INDAP, Francisco Briones, señaló “que es importante la utilización eficiente de los recursos hídricos, por tanto este tipo de convenio, sobre todo en la región de Tarapacá, son relevantes para poder maximizar la eficiencia del recurso con sistemas productivos controlados. Por ejemplo, los cultivos bajo invernadero han permitido a los usuarios poder diversificar e incorporar cultivos que habitualmente no se producen en la región y requieren condiciones especiales de temperatura, humedad y calidad del aire”.
Resultados
Como resultado de este convenio se espera contar con la identificación de 6 sistemas de riego en ambiente con asentamiento en la provincia del Tamarugal, priorizándose en esta primera etapa, aquellos ubicados en las comunas de Huara, Pozo Almonte y Pica. Asimismo, se deberá indicar el estado en que se encuentra la infraestructura productiva, en cuanto a materialidad y equipamiento, estableciéndose los requerimientos de ampliación o mejoras necesarias para asegurar el correcto funcionamiento y uso del sistema de riego en ambiente controlado.
Luego, contempla el diseño de 6 proyectos que deben contar con un plan de capacitación de 5 meses, con la correspondiente carta Gantt para cumplir con el objetivo de aprendizaje del usuario del sistema productivo (Aprender Haciendo).
Para finalizar con la ejecución de las iniciativas aprobadas, vendría la ampliación y/o mejoramiento de 6 módulos de sistemas de riego en ambientes controlados. Esta labor contempla el fortalecimiento de la infraestructura de riego (fuente hídrica, bombeo–extracción, energización, conducción, almacenamiento, distribución, fertirrigación, automatización, entre otros). Así como también, la infraestructura productiva propiamente tal, ya sea invernadero, malla, plástico, cableado, tutores, etc.
A esto se suma la entrega de acompañamiento y asesoría técnica especializada, de manera permanente y continua, orientada a los agricultores vinculados a los 6 módulos de sistemas de riego en ambientes controlados seleccionados. Dicho proceso de extensión, deberá corresponderse con el “Plan de Capacitación” diseñado y aprobado para cada agricultor.
