Desde el municipio de Arica denuncian que personas en situación de calle que habitan el lecho del río San José, han afectado en numerosas ocasiones el sistema eléctrico de los sectores aledaños, puesto que constantemente vulneraran las cajas eléctricas para colgarse al servicio.
La denuncia fue realizada por el encargado del Departamento de Iluminación Municipal, José Guzmán, quien explicó que el problema es arrastrado desde hace más de un año, coincidentemente con el inicio de la pandemia.
“Esto viene, por lo menos, desde el inicio de la pandemia. Hemos estado haciendo un trabajo constante en el sector, reparamos, pero nuevamente llegan, rompen y hacen el daño. Lo hemos visto con carabineros, pero no hay caso”.
Más de 10 oportunidades han tenido que intervenir los equipos de iluminación municipal para reparar las cajas eléctricas, ubicadas en pagodas que adornan el paseo peatonal a un costado del lecho del río en la población Rosa Esther.
Pero pese a los esfuerzos para reparar y pintar estos dispositivos, los habitantes de los rucos continúan vandalizando el lugar, amenazando incluso a punta de arma blanca a los funcionarios municipales.
Varios son los riesgos que conlleva la manipulación de las cajas de electricidad. Además del evidente peligro de una electrocución, el servicio domiciliario puede verse comprometido ante un desperfecto, ocasionado por la intervención ilegal de estos elementos. A esto se suma la amenaza que genera para los habitantes y transeúntes del paseo peatonal, quienes circulan entre conexiones irregulares y cajas abiertas.