La Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi informó este martes sus resultados al cierre del primer semestre a la Comisión para el Mercado Financiero, volviendo a romper récords en producción, utilidades y pago de impuestos. La empresa declaró utilidades por 1.358 millones de dólares y una tributación de 745 millones de dólares.
Desde la compañía minera informan que en enero-junio tuvieron una producción de 331 mil toneladas de cobre fino, lo que significa un salto respecto de las 323 mil toneladas del mismo período de 2020.
Esta variación también provocó una fuerte alza en la carga tributaria de la minera, generando pagos de impuestos al Estado por 745 millones de dólares, el mayor aporte realizado por la empresa hasta ahora según declaran. La cifra, que implicó un incremento de 272% frente a igual período del año anterior, incluye el aporte al fisco a través del Impuesto Específico a la Minería (IEM), que alcanzó 232 millones de dólares en el período, monto 493% mayor que los 47 millones de dólares aportados por este concepto durante los primeros seis meses de 2020.
El presidente ejecutivo de la compañía, Jorge Gómez, sostuvo que “estos resultados son una prueba de que la fórmula del impuesto específico a la minería, por cierto perfectible, efectivamente funciona. En este caso, el precio del cobre subió sustancialmente y la contribución de nuestra empresa por este concepto se multiplicó por cinco veces”. Impulsados principalmente por el mayor precio del cobre, en el período la faena ubicada en la comuna de Pica, región de Tarapacá, registró ingresos por ventas de concentrado de cobre que alcanzaron US$ 2.885 millones (2 billones 236 mil 278 millones de pesos), mientras que su costo C1 (costo de producción) se ubicó en US$ 0,68 por libra, y las utilidades fueron de US$ 1.358 millones.
Éstas más que duplican los US$ 601 millones (465 mil 859 millones de pesos) de la primera mitad de 2020. Dichos resultados responden al aumento que registró el precio promedio de venta del cobre, al incremento de 2,7% de la producción y a una disminución de 5,6% del costo C1 frente a igual período de 2020, factores a los que se sumaron la optimización de procesos y el avance de la vacunación de quienes trabajan en las instalaciones de la minera.
