Un grupo de familiares de “presos del estallido social” inició una huelga de hambre y anunció que la mantendrá, al menos, hasta que el Senado vote el proyecto de indulto, el próximo 2 de noviembre.
El vocero de la Asamblea Nacional de Familiares de Presos Políticos, Jaime Fuentes, hizo un llamado a los senadores y exigió que “de una vez por todas la aprueben, la ley de indulto, y dejen de dilatar este proyecto”.
“Si hablamos de un Chile democrático, no podemos hablar de presos políticos. Si hablamos de un avance en estas elecciones en un futuro Gobierno, en un nuevo Chile, no podemos hablar con prisión política en nuestro país”, dijo Fuentes.
“Es por eso que hoy como familiares tomamos estas medidas desesperadas, porque hemos visto cómo la clase política ha hecho oídos sordos a las demandas del pueblo, cómo la clase política ha dilatado por más de 10 meses la aprobación de un proyecto que necesita urgencia”, sentenció.
Ante esta situación, el director del Instituto Nacional de Derechos Humanos, INDH, Sergio Micco, defendió la manifestación y señaló que se trata de una acción “legítima”.
“Dentro del concepto de libertad de expresión, también de la libertad de conciencia, nosotros entendemos que estamos frente a un medio”, manifestó-
“Las huelgas de hambre, en mi opinión como director del INDH, es un método legítimo dentro de una democracia para hacer ver las demandas de una sociedad que, a través de los medios institucionales, siente que no se están resguardando sus derechos”“, señaló Micco.