Austria ha contabilizado 13.806 nuevos contagios diarios por coronavirus, la cifra más alta registrada en un lunes desde el inicio de la pandemia en este país, que este lunes se ha convertido en el primero de Europa que impone un confinamiento para frenar la actual oleada de la pandemia de COVID-19.
Según los datos publicados por los Ministerios de Sanidad y de Interior, la incidencia de contagios a siete días ha vuelto a batir un récord al situarse en 1.107 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes, mientras que la tasa de muertes por coronavirus es de 135 por cada 100.000 habitantes.
El confinamiento incluye el cierre del comercio no esencial, la gastronomía, los hoteles y los eventos culturales, mientras que el deporte profesional tiene lugar sin público y la asistencia a los colegios, que siguen abiertos, es opcional. Además, el canciller federal, el democristiano Alexander Schallenberg, anunció que se impondrá la vacuna obligatoria a partir de febrero de 2022.
La medida desató protestas el fin de semana, al igual que en países como Bélgica y Holanda, o en Guadalupe, departamento francés de las Antillas, donde la vuelta de las restricciones por el COVID-19 genera una violenta revuelta.
El crecimiento altamente exponencial de los contagios es atribuido a la llegada de la temporada fría, la agresividad de la variante delta y, sobre todo, al relativamente bajo índice de vacunación, especialmente baja en las regiones de Alta Austria y Salzburgo, colindantes con la alemana Baviera. Hasta el momento, 5,9 millones de personas, es decir, un 66 % del total de 8,9 millones de habitantes, ha recibido la pauta completa de una vacuna contra el coronavirus.
Austria inicia un nuevo confinamiento en su peor día de contagios
El país, el primero en Europa en volver a instaurar la medida, registró más de 13.000 nuevos casos y una incidencia semanal de 1.107 contagios por cada 100.000 habitantes.