Este lunes se puso en marcha el nuevo reglamento del control de consumo de drogas aprobado en julio pasado, que obliga a los parlamentarios de la Cámara de Diputadas y Diputados a realizarse un test de drogas.
La normativa que se aplica a la Cámara Baja busca regular “la prevención del consumo indebido de sustancias o drogas estupefacientes o sicotrópicas” y “evitar la comisión de delitos del narcotráfico u otros relacionados a estos“.
Asimismo, la medida busca “elevar los estándares de transparencia en la labor parlamentaria y evitar la comisión de delitos de narcotráfico, además de prescindir de cualquier relación entre la Cámara y las redes de narcotráfico que existen en el país”.
En esta oportunidad, tras un sorteo realizado el pasado martes 16 de agosto, 78 parlamentarios y parlamentarias deberán realizarse hasta el 30 de agosto un examen de pelo que dejará en evidencia si consumen estupefacientes como cannabis, cocaína, anfetaminas, entre otros.
La aplicación del test será semestral y de manera aleatoria. Siendo el objetivo de la medida que todas y todos tengan que pasar por el control dos veces en los cuatro años de su período legislativo.
En el caso que el o la legisladora de positivo en el test, su nombre se hará público y deberá autorizar el levantamiento de su secreto bancario y si existe alguna transacción por sobre las 800 UF, deberán ser justificadas.
Entre quienes fueron seleccionados se encuentran Camila Flores, Diego Schalper, Maite Orsini, Gonzalo Winter, Joaquín Lavín, Juan Antonio Coloma y la diputada por la región de Tarapacá, Danisa Astudillo, entre otros.
