Por medio de una declaración pública, las consejeras regionales de Pica, Camila Navarro, María Teresa Oxa y Claudia Jofré aseguraron que al interior de la Municipalidad de Pica existen situaciones de violencia laboral, sistemática y reiterada, las que han tenido lugar durante los últimos años.
Como autoridades firmantes, aseguraron que han tomado conocimiento sobre denigrantes y humillantes tratos sufridos por funcionarios y funcionarias municipales, a los que se suman dos causas judiciales que se encuentran en actual tramitación, ante el Juzgado de Letras de Pozo Almonte, en las que la persona denunciada es el alcalde de Pica, Iván Infante Chacón.
En detalle, la misiva señala que respecto a los casos judiciales, dos funcionarias afectadas ejercían cargos relevantes al interior del Municipio, siendo la primera encargada de Seguridad Pública, quien tiene contacto directo con Carabineros y se hace cargo de situaciones de violencia en la comuna de Pica. En tanto, la segunda víctima ejercía el rol de Coordinadora de la Oficina de la Mujer.
Asimismo, el oficio detalla que existen otras víctimas que no han realizado denuncias formales por miedo a represalias tales como perder su empleo y consecuencias con sus familias.
Las autoridades firmantes precisan en el texto que les preocupa la falta de protección y el desconocimiento de derechos de los funcionarios de Pica, por lo que hacen un llamado a que se pueda fiscalizar y sancionar las infracciones legales que se detecten.
Finalmente, el documento asegura que condenan los actos de violencia que han ocurrido al interior del Municipio de Pica, además, las dos autoridades que suscriben la carta, no sólo
solidarizan y empatizan con los hechos mencionados anteriormente, sino que también expresan ser víctimas de violencia política, en su rol como concejalas, siendo víctimas de
exposición y hostigamiento de parte de la máxima autoridad comunal, solo por el hecho de cumplir con el rol para el que fueron elegidas democráticamente.
LA DECLARACIÓN PÚBLICA
Las autoridades firmantes hemos tomado conocimiento sobre denigrantes y humillantes tratos sufridos por funcionarios y funcionarias municipales, lo que es inaceptable; sumado a dos causas judiciales que se encuentran en actual tramitación, ante el Juzgado de Letras de Pozo Almonte. En relación con esto último, en ambas causas, la persona denunciada es la máxima autoridad de la comuna, el alcalde Sr. Iván Infante Chacón.
Hace un mes, conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, a nivel nacional e internacional, destacándose a través de la historia que gracias a la organización y la lucha de las mujeres se han ido reconociendo mayores derechos, no obstante, las brechas de género y los desafíos aún son latentes para avanzar hacia la equidad en todos los ámbitos y esferas de nuestra vida.
En ese contexto nos parece lamentable, que, por medio de esta declaración, tengamos que dar cuenta de situaciones de violencia laboral, sistemática y reiterada, en los últimos años, al interior de la I. Municipalidad de Pica.
Las autoridades firmantes hemos tomado conocimiento sobre denigrantes y humillantes tratos sufridos por funcionarios y funcionarias municipales, lo que es inaceptable; sumado a dos causas judiciales que se encuentran en actual tramitación, ante el Juzgado de Letras de Pozo Almonte. En relación con esto último, en ambas causas, la persona denunciada es la máxima autoridad de la comuna, el alcalde Sr. Iván Infante Chacón.
Respecto a los casos judiciales, dos funcionarias afectadas ejercían cargos relevantes al interior del Municipio: La primera era Encargada de Seguridad Pública, quien tiene contacto directo con Carabineros, responde a las necesidades de la comunidad y se hace cargo de situaciones de violencia suscitadas en la comuna de Pica. En el segundo caso, la víctima ejercía el rol de Coordinadora de la Oficina de la Mujer, lo cual nos parece una práctica reprochable y de poco entendimiento con la importancia de dichas oficinas en cuanto el abordaje de la violencia de género en las comunas.
Es importante, dar a conocer que las otras víctimas, no han realizado denuncias formales por miedo a represalias; a perder el empleo, e incluso por las consecuencias que podría tener con sus familias, puesto que hay muchos familiares que dependen del trabajo que realizan en el Municipio.
Esta situación es grave, pues el poder de una autoridad no puede ser mal utilizado, ejerciendo violencia en contra de funcionarias al interior de las entidades públicas.
Por este motivo, empatizamos con las dos víctimas que llevaron a cabo las denuncias, puesto que sabemos que son procesos largos, y que en este periodo sus familias e hijos han recibido represalias, además de verse afectada la salud mental de ambas por sostener un proceso que lleva a la revictimización, en la mayoría de los casos.
Como autoridades nos preocupa la falta de protección y el desconocimiento de derechos de los funcionarios municipales de Pica. Por lo mismo, en esta declaración, llamamos a que se pueda fiscalizar y sancionar las infracciones legales que se detecten.
Por último, enérgicamente condenamos los actos de violencia que han ocurrido al interior del Municipio de Pica, es impresentable lo que ha sucedido, considerando los lineamientos y principios de la función pública en nuestro país. Así también, queremos manifestar, que dos de quienes suscriben esta carta, no solo solidarizan y empatizan con los hechos mencionados anteriormente, sino que también expresan ser víctimas de violencia política, en su rol como concejalas, siendo víctimas de hostigamientos y exposición de parte de la autoridad máxima comunal, solo por el hecho de cumplir con el rol para la que fueron elegidas democráticamente.
Para avanzar como sociedad, necesitamos que estos hechos no queden invisibilizados, por el bien de la comuna y nuestra región.
