La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, clamó este lunes contra el presunto “encubrimiento” del atentado que sufrió el pasado 1 de septiembre, al tiempo que apuntó contra Patricia Bullrich, precandidata presidencial por la principal coalición opositora del país.
En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, la también exmandataria (2007-2015) se refirió a una noticia publicada este domingo por el diario argentino Página 12, donde se revelaba que una testigo clave del caso sufrió presiones para borrar los datos de su teléfono móvil en unas oficinas relacionadas con Bullrich.
Según esta información, la testigo, exasesora del diputado opositor Gerardo Milman, declaró ante la Justicia que no vació el teléfono “por voluntad propia, sino que fue llevada a oficinas de Patricia Bullrich, donde un perito eliminó el contenido de su aparato, el de otra asesora y el del propio Milman”.
De acuerdo al diario, la testigo estaba en compañía de Milman en un bar cuando otro funcionario del Congreso lo escuchó decir “cuando la maten yo estoy camino a la costa”, justo dos días antes del atentado.
“Resulta muy impresionante no sólo la naturalización de la violencia política sobre mi persona, sino también el encubrimiento del intento de asesinato ocurrido el 1 de septiembre”, señaló Cristina Fernández a través de Twitter.
El bloque del oficialista Frente de Todos en el Senado calificó esta información como un hecho de “profunda gravedad” que debe ser investigado “hasta las últimas consecuencias”.
“Es necesario que la jueza federal María Eugenia Capuchetti (responsable de la causa) y el fiscal Carlos Rívolo investiguen todas las pistas vinculadas al intento de magnicidio, ocurrido hace ya más de ocho meses. Se deben conocer quiénes son los autores materiales, intelectuales y, eventualmente, los financistas del atentado”, subrayó la formación política en un comunicado difundido por redes sociales.
El ataque fallido fue perpetrado el 1 de septiembre pasado, cuando Fernando Sabag Montiel, un brasileño de 36 años, se acercó a la vicepresidenta, le apuntó al rostro con un arma y gatilló sin que saliera el proyectil, en un momento en que Cristina Fernández saludaba a seguidores a las puertas de su domicilio en Buenos Aires.
Sabag Montiel y su novia Brenda Uliarte, de 23 años, permanecen detenidos como presuntos coautores del delito de homicidio, así como Nicolás Carrizo, de cuyo teléfono móvil supuestamente salieron varias comunicaciones vinculadas al atentado.
Cristina Fernández clama contra el “encubrimiento” del atentado que sufrió el año pasado
La expresidenta se refirió al supuesto caso de una testigo clave que sufrió presiones para borrar los datos de su teléfono móvil en unas oficinas relacionadas con Patricia Bullrich.