Según un informe de Atisba Monitor, cerca de 1.115 viviendas se estiman que existen en la toma Paso La Mula ubicada al sur de la comuna de Alto Hospicio. En el asentamiento de 668 metros cuadrados y cerca de 100 hectáreas pertenecientes al Ministerio de Bienes Nacionales, viven más de 5.000 habitantes.
Frente al incremento de viviendas irregulares, la toma se ha transformado en “una ciudadela” que cuenta con comités de viviendas, canchas de fútbol, negocios, una ferretería, hasta incluso un paradero para Uber.
Sin embargo, las autoridades de la región de Tarapacá han denunciado que junto al crecimiento de La Mula, se ha evidenciado la venta ilegal de terrenos fiscales y la presencia de bandas de crimen organizado.
En ese contexto, los dirigentes de los comités de vivienda que integran la toma aseguran que “no todo lo malo que dicen en las entrevistas, ni en Santiago” es real, sino que también “hay familias necesitadas, niños y adultos mayores”.
Además, los pobladores que se han organizado en este asentamiento han manifestado la necesidad de concretar un catastro para que la toma pase a ser un campamento en la comuna de Alto Hospicio.
“El llamado a nuestras autoridades es que nos tomen en cuenta“
Jorge Navarrete Sid es el presidente del Comité Nueva Vista que agrupa a 65 familias que viven en la toma La Mula. Según el dirigente, los pobladores están viviendo “una situación de no registro”, por lo que pide a las autoridades locales que la toma pase a ser un campamento.
“Lo que nosotros necesitamos es que podamos pasar a ser campamento y para eso el Gobierno tiene que tener un compromiso con nosotros para que nosotros podamos trabajar en conjunto con ellos y lograr el registro para el campamento”, agregó.
El dirigente hizo un llamado a las autoridades regionales a “que nos tomen en cuenta, que confíen en nosotros, que nosotros estamos dispuestos a que nos hagan el catastro para poder ser campamento”.
“El llamado en este minuto a nuestras autoridades es que nos tomen en cuenta, que confíen en nosotros, estamos dispuestos a que nos hagan el catastro para poder ser campamento”, expuso.
Por su parte, Lizeth Padilla, presidenta del Comité Altamirano, que reúne alrededor de 400 familias señaló que el grupo que lidera “quedó fuera del catastro que iniciaron el año 2020” y aseguró que el 90% de la toma no ha sido catastrada.
“Empezó un catastro, lo pausaron y quedamos todos en la misma situación de ser solamente una toma y no pasamos a ser campamento. No hemos sido registrados más que por el INE (Instituto Nacional de Estadísticas)”, explicó.
“2.000 familias están fuera del catastro”
Según la dirigenta, alrededor de 2.000 familias están fuera del catastro, tanto para los sitios que están tomados como para las familias que están viviendo irregularmente como allegados.
Además, indicó que han solicitado “muchas audiencias con el jefe de asentamientos precarios, con Bienes Nacionales, y en algún momento Serviu se acercó a nosotros para hablar sobre el tema del inicio del catastro, pero hasta ahora no hemos tenido respuesta”.
“Nos dieron como un suspiro de cómo podría ser, de que estaban eligiendo una fundación que se iba a encargar de hacer el catastro, pero no nos dijeron una fecha de cuándo iba a iniciar. Por ende, hasta ahora no tenemos respuesta con eso”, acotó.
La presidenta del Comité Altamirano enfatizó que “lo principal es el catastro para poder saber el resto de personas que viven acá, para que puedan ver que el Paso La Mula no todo lo malo que dicen en las entrevistas, ni en Santiago, ni todo lo que dicen, sino que también hay familias necesitadas, niños y adultos mayores”.
“Con respecto a las necesidades, estamos copados, usted ve que somos dirigentes que estamos constituidos. Legalmente tenemos nuestra jurídica, tenemos todo, y estamos trabajando por la necesidad de nuestra gente. Necesitamos que todo el Gobierno se haga cargo, que inicien el catastro. Necesitamos saber qué va a pasar. Por último, que hagan un segundo plan integral para poder ver el tema de las familias que están por fuera, no solamente en situación de tomas y campamentos, sino también familias allegadas que están por fuera, que nunca han tenido casa y que llevan postulando años y están por fuera, que nos busquen también para ayudarlos y no hay respuesta”, complementó.
“Nuestro comité es bastante seguro”
Frente al incremento de viviendas irregulares, el alcalde de Alto Hospicio, Patricio Ferreira, afirmó que La Mula se ha transformado en “una ciudadela” que cuenta con canchas de fútbol, negocios, una ferretería, hasta incluso un paradero para Uber.
Además, el edil expresó su preocupación por venta ilegal de terrenos, el acopio de autos robados y la presencia de bandas de crimen organizado.
Respecto a esta situación, el presidente del Comité Nueva Vista manifestó que “no en todos lados ocurre lo mismo. De hecho, nuestro comité es bastante seguro, está cerrado por dos lados. Me falta solamente la línea y el sector frontal para que la persona que quiera ingresar ilegalmente a nuestro comité y hacer destrozos, desmanes, robos, asaltos, no lo haga”.
En octubre del 2022 comenzó a funcionar un destacamento policial de Alto Hospicio con una garita en el sector Paso de Mula que permite dar mayor seguridad y cobertura ante emergencias a un importante número de habitantes de la zona sur y los campamentos de la comuna.
El dirigente destacó que la garita de Carabineros “ha servido muchísimo para el control vehicular. Ustedes ya vieron recién, ellos están fiscalizando. Lo hacen de día, lo hacen en la tarde, a veces lo hacen de noche, los fines de semana con el alcotest y el tema de la droga”.
“Generalmente están todos acá. Nosotros damos la vuelta aquí en la rotonda de la esquinita para entrar a nuestro comité y se ve el trabajo de ellos esforzado y todos los días están en la misma postura. Nosotros, gracias a ellos, también nos sentimos un poco más protegidos del tema de la delincuencia”, señaló.
Esta semana se cumplieron 7 meses del lanzamiento del “Plan Calles Sin Violencia” del Gobierno, que consiste en intervenciones de carácter regional y comunal en aquellas comunas con mayor concentración de delito. En Alto Hospicio se realizó un despliegue de servicios públicos en una Plaza de Seguridad en la comuna.
Sobre este plan, el dirigente aseveró que “nos ha favorecido muchísimo. De hecho, se ha controlado el sistema de vehículos medios camuflados, con motores adulterados, cosas que antes no se hacían. Ahora por lo menos nosotros tenemos la seguridad de que Carabineros está al resguardo de nosotros”.
“Tenemos contacto con Carabineros dentro del comité, dentro de la toma. Ellos generalmente están recorriendo la zona. Tengo un trabajo pendiente con Carabineros que es ponerles nombre a nuestras calles. Las demás no sé cómo estarán, tengo un programa para el tema de las calles, ya tenemos programado hacerlo dentro de aquí a enero. Ponerle nombre a las calles y tener las casas con número para que Carabineros pueda dirigirse de mejor manera hacia el ciudadano que necesita apoyo logístico”, comentó Jorge Navarrete Sid.