El partido socialista PSOE y la formación independentista catalana Junts firmaron este jueves en Bruselas un acuerdo para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno español, que incluye una futura amnistía para independentistas procesados por la Justicia.
El acuerdo es clave para que el socialista Pedro Sánchez pueda ser investido presidente para otros cuatro años en España.
El pacto lo rubricaron el número tres de los socialistas, su secretario de Organización Santos Cerdán, y el secretario general de Junts, Jordi Turull.
Los negociadores de Junts y el PSOE cerraron el acuerdo en las últimas horas después de unos días de intensificación de los contactos, con múltiples intercambios de documentos para pulir el redactado de la ley de amnistía y evitar que sus posibles beneficiarios puedan verse afectados por interpretaciones restrictivas.
Una ley de amnistía que tendrá que registrarse en los próximos días en el Parlamento español para su tramitación, antes del debate de investidura de Pedro Sánchez, que se espera para la semana que viene.
El “número tres” del PSOE, Santos Cerdán, dijo hoy en Bruselas que el acuerdo entre su partido y JxCat para una futura amnistía no incluye “nombres” y cubre a las personas relacionadas “directa o indirectamente” con el procés “entre 2012 y 2023”.
El PSOE aseguró además que el acuerdo con Junts es para la legislatura y no solo para la investidura.
En tanto, el expresidente de Junts Carles Puigdemont, instalado en Bélgica, señaló que la estabilidad del Gobierno y la legislatura se la tendrán que ganar el PSOE día a día.
“La estabilidad del Gobierno, la legislatura, sobre todo en temas de presupuestos y que pueden ser relevantes del Gobierno en las cortes, aparecerá de la negociación permanente que tenga resultado y que se vaya cumpliendo a lo largo de la legislatura… Sin avances ni cumplimiento, la legislatura no puede avanzar”, afirmó.
Esa ley es fuertemente criticada desde distintos sectores, en especial la derecha, que ha convocado protestas para el próximo domingo en toda España al considerarla inconstitucional.
Desde el pasado fin de semana se suceden concentraciones frente a sedes del PSOE en distintas partes del país, que en la sede central del partido en Madrid derivaron en incidentes con detenidos y heridos, con presencia de grupos ultras.
La mesa de negociación se ha visto sacudida estos días por el impacto de la decisión del juez de la Audiencia Nacional española Manuel García Castellón, que acordó dirigir la investigación por terrorismo contra Puigdemont y otros independentistas procesados.
La derecha habla de dictadura
“España ha perdido, los independentistas están ganando y el PSOE ha desaparecido”, sentenció el líder de los conservadores españoles, Alberto Núñez Feijóo tras conocer el acuerdo que desbloquea la investidura de Sánchez.
El Partido Popular (PP) de Núñez Feijóo fue el más votado en las urnas en julio, pero no logró los apoyos parlamentarios para hacerse con el poder al intentar la investidura en septiembre.
Núñez Feijóo acusó al mandatario español de “ceder en un chantaje” al independentismo con tal se mantenerse en el poder.
La presidenta del Gobierno regional de Madrid, conservadora Isabel Díaz Ayuso, fue más allá al denunciar que España está al comienzo de “una dictadura”.
El PP tiene convocadas movilizaciones en toda España para el domingo, tras desmarcarse de las protestas que en los últimos días se han celebrado ante sedes socialistas, marcadas por incidentes protagonizados por grupos de ultraderechistas.
Además de Junts, Sánchez cuenta con el respaldo de la formación de izquierda con la que gobernado hasta el momento en coalición, ahora denominada Sumar, y de otras fuerzas nacionalista e independentistas catalanas, vascas y gallegas.
Socialistas e independentistas catalanes firmaron acuerdo para la investidura de Sánchez
El cuestionado pacto incluye una futura amnistía para independentistas procesados por la Justicia. La negociación es para la legislatura y no solo para la investidura, adelantaron desde el PSOE.