La Brigada Investigadora de Trata de Personas Iquique (BRITRAP) de la Policía de Investigaciones (PDI), en un trabajo mancomunado con la Fiscalía Local de Iquique, logró establecer que una ciudadana venezolana de 28 años, captaba mujeres en su país y las trasladaba hasta las ciudades de Iquique o Santiago donde eran explotadas sexualmente.
La detenida, era el brazo operativo de los líderes de una célula del “Tren de Aragua” en Chile, vinculada directamente con “Estrella” y alias “Satanás” respectivamente, quienes se encuentran en prisión preventiva desde marzo del año 2022.
La jefa de la BRITRAP, subprefecta Katherine Vásquez, señaló “que la imputada huye a Perú en forma posterior a dichas detenciones, regresando hace unos meses al país para instalarse en Santiago, ciudad en que posterior a diversas diligencias realizadas por dicha Brigada fue ubicada por los oficiales de caso”.
Sobre su detención, el subprefecto Cristian Chávez García, jefe (s) de la Prefectura de Antinarcóticos y contra el Crimen Organizado Norte, detalló que el pasado viernes 19 de enero, en la ciudad de Santiago, se logró ubicar y detener a una mujer de nacionalidad venezolana mayor de edad, apodada “La Ruca”, por su responsabilidad en el delito de trata de personas con fines de explotación sexual vinculada directamente a la organización criminal Tren de Aragua.
“De acuerdo a los antecedentes que se manejaban en el mes de marzo del año 2022, cuando se procede a la desarticulación de la estructura criminal Tren de Aragua en la región de Tarapacá, esta mujer huye junto a su pareja a la ciudad de Lima, Perú”, agregó.
Sin embargo, tras un minucioso trabajo investigativo de análisis y cruce de información desarrollado por los oficiales investigadores, se logró establecer que durante 2023 “la Ruca” habría regresado al país de forma irregular para asentarse en la región Metropolitana.
Con los antecedentes que manejaba la PDI, el viernes 19 de enero se logró la detención de esta mujer en la ciudad de Santiago, siendo puesta a disposición del tribunal respectivo. La detenida quedó en prisión preventiva fijándose un plazo de investigación de 120 días por parte del Ministerio Público.