La reciente Asamblea General de la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos, celebrada en Chile en medio de la crisis de seguridad regional, ha destacado la imperante necesidad de colaboración internacional en la lucha contra el crimen organizado. Fundada en 1954, esta asociación trabaja incansablemente para fortalecer la cooperación entre las 22 fiscalías que la conforman.
Durante la reunión de este año, se resaltó la creciente expansión del crimen organizado en la región.
El fiscal nacional de Chile, Ángel Valencia, enfatizó la importancia crucial de la cooperación internacional para intercambiar información y estrategias en la batalla contra estas amenazas que trascienden fronteras.
El encuentro también sirvió como plataforma para fortalecer la colaboración con Venezuela, particularmente en la obtención rápida de información para facilitar investigaciones transfronterizas. A pesar de la ausencia del fiscal general venezolano, se logró una conversación fructífera con la delegación presente.
La presencia de grupos criminales colombianos, como Los Chotas, Los Espartanos y el Tren de Aragua, en Chile, generó preocupación, especialmente en Antofagasta. Francisco Barbosa, fiscal general de Colombia, subrayó la importancia de abordar la amenaza de manera integral, enfocándose no solo en perseguir a las bandas, sino también en desarticular su patrimonio.
La compleja situación de inseguridad en Ecuador, afectado recientemente por una crisis sin precedentes, fue otro punto de discusión. Se resaltó la necesidad de no solo perseguir a los criminales, sino también de incautar sus activos para debilitar su capacidad financiera.
En el contexto de la creciente complejidad del crimen organizado, los fiscales abogaron por un trabajo colaborativo no solo entre los ministerios públicos de América Latina, sino también con la participación activa de España y Portugal. La reunión subrayó la esencialidad de un enfoque integral que combine la persecución criminal con la incautación de activos para hacer frente a las organizaciones delictivas que operan a nivel internacional.
