Luego de diez años de tramitación, la Fiscalía Centro Norte puso término a la investigación contra el ex controlador de SQM, Julio Ponce Lerou, en el marco del denominado caso Cascadas.
Se trata de uno de los mayores escándalos financieros del país, vinculado al desarrollo de un esquema para vender acciones a un precio menor a las sociedades relacionadas, perjudicando así a los accionistas minoritarios como las AFP y los fondos mutuos.
A través de un escrito presentado ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, el 14 de marzo pasado, el fiscal regional Xavier Armendariz, informó la decisión de cerrar la causa y no perseverar en el procedimiento.
En el escrito, se indica que “durante la investigación realizada no se han reunido antecedentes suficientes para fundar una formalización o acusación”.
Con esta determinación, el caso terminó sin finalizó de cargos contra el empresario y sin ningún condenado, tras el inicio de la indagatoria en 2016.
Recordemos que el caso se destapó en 2013, cuando la Superintendencia de Valores y Seguros (ahora CMF) formuló cargos contra el entonces controlador de SQM, Ponce Lerou, y sus empresas cascadas como Norte Grande, Oro Blanco y Pampa Calichera.
En 2014 le aplicó una multa por US$62 millones que fue rebajada por la Corte Suprema a US$3 millones en 2020, pese a afirmar que el empresario fue “ideólogo y promotor de un esquema de transacciones que lo benefició a él y a personas y sociedades relacionadas”.
Otro de los hitos para no seguir adelante con la persecución de Ponce Lerou fue la absolución en 2019 de su mano derecha y ex gerente de las Sociedades Cascadas, Aldo Motta, a quien se le acusaba de infracción a la ley de Mercado de Valores.
La investigación que llevó adelante el Ministerio Público apuntaba a que el controlador de SQM fue el artífice del esquema defraudatorio y que las acciones desplegadas por Motta fueron en directo beneficio de Ponce Lerou.
