El alcalde Patricio Ferreira y el Cuerpo de Concejales condenaron enérgicamente los actos vandálicos que dañaron y destruyeron parte de la infraestructura de los toboganes en la Plaza de Armas de Alto Hospicio. Este espacio es utilizado diariamente por los niños y niñas de la comuna.
Los arreglos, que incluyen la reposición de las palmetas de caucho robadas, podrían tardar debido a su alto costo y la necesidad de adquirir materiales en otras ciudades del país. Durante este tiempo, los pequeños no podrán disfrutar del principal espacio público de la comuna.
El alcalde Ferreira hizo un llamado a la comunidad para cuidar el mobiliario público y denunciar cualquier acto de vandalismo que dañe la infraestructura, que pertenece a todos los hospicianos.