La ministra del Interior, Carolina Tohá, en compañía de autoridades de Gobierno y de las policías, presentó detalles de la nueva etapa del Plan Calles Sin Violencia en la región Metropolitana.
Esta nueva fase del plan contempla un aumento de dotación de 1.669 Carabineros y nuevas estrategias operativas para la región Metropolitana por parte de Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI), en el marco de las medidas anunciadas para fortalecer el combate contra la delincuencia y el crimen organizado.
La secretaria de Estado indicó que se tendrá presencia policial en más lugares públicos, operativos intensificados en los lugares de riesgo, medidas para intensificar la presencia policial nocturna, más fiscalización de irregularidad migratoria y más fiscalización de armas denunciadas por la población.
En detalle, el plan incluye fiscalizaciones migratorias masivas, a cargo de la PDI. Junto con ello, habrá tres operativos semanales en la región Metropolitana. También habrá un operativo masivo masivo mensual de fiscalización a nivel nacional.
La PDI también tendrá un aumento de 135 a 250 funcionarios que conforman el plan Modelo Territorial Cero, que se enfoca en la investigación para el control e incautación de armas.
Por otro lado, como había sido anunciado en semanas anteriores por el Ejecutivo, Carabineros aumentará sus filas a 1.669 funcionarios. De ese número, 909 corresponden a nuevos efectivos policiales.
Además, para llevar a cabo labores operativas en la región Metropolitana, se designarán 57 aspirantes a oficiales en práctica, 236 administrativos de la Dirección General de Carabineros y 42 funcionarios liberados de zonas y prefecturas de la capital.
Desde mediados de agosto más de 500 carabineros que se encuentran en el último semestre de la Escuela de Formación y en período de práctica, con instrucción y permiso para usar armas, se desplegarán en lugares de alta afluencia de personas en toda la región.