La Fiscalía Regional del Biobío inició una investigación administrativa contra el persecutor especializado en delitos de violencia rural, Juan Yáñez, por las eventuales responsabilidades en la libertad de Tomás Antihuen Santi, quien se mantiene prófugo por el triple crimen de carabineros registrado el pasado 27 de abril.
Las diligencias buscan determinar las razones detrás de las decisiones adoptadas por el fiscal y que derivaron en que el comunero no quedara privado de libertad tras ser detenido y formalizado por el lanzamiento de una bomba molotov a una patrulla policial en Cañete, en 2022.
Pese a la gravedad del delito cometido, Tomás Antihuen Santi no cumplió con las medidas cautelares de baja intensidad interpuestas por el tribunal, teniendo además la posibilidad de ser sometido a un juicio abreviado al cual tampoco se presentó.
Además, recién en marzo de 2023 la justicia dictó una orden de detención permanente contra el imputado, manteniéndose prófugo desde aquella fecha.
Dichas circunstancias derivaron en que Tomás Antihuen pudiese participar del atentado contra los carabineros Carlos Cisterna Navarro, Sergio Arévalo Lobos y Misael Vidal Cid, durante la madrugada del 27 de abril del presente año.
Al respecto, el fiscal nacional, Ángel Valencia, declaró que “la decisión que terminó con la libertad del comunero tiene características anómalas, ya que no es una situación normal y que ameritaba ser investigada para ser esclarecida”.
Por su parte, Michelangelo Bianchi, fiscal regional subrogante del Biobío, confirmó que un persecutor ya se hizo cargo de la indagatoria administrativa al fiscal Juan Yáñez.