Durante su discurso por el 199 aniversario de la independencia boliviana, el presidente de Bolivia, Luis Arce, propuso un referendo para consultar a la población sobre la subvención del coste interno de los combustibles.
El gobernante reconoció los problemas que en los últimos meses afectaron al país, especialmente con el abastecimiento de diésel producto de varios factores y la falta de dólares que, a su juicio, se usa “políticamente por algunos grupos para generar escenarios de convulsión”.
Por tal motivo, Arce propuso “la convocatoria a un referéndum en la fecha en la que se desarrollen las elecciones judiciales”, que en Bolivia se someten a voto popular y cuyo día aún está sin definir.
El presidente explicó que el 58 % de la gasolina y el 86 % del diésel consumidos en Bolivia se importan, lo que “se agrava en un entorno donde los precios internacionales de estos bienes” son altos y supone “una mayor salida de divisas” que derivó en “la actual situación de especulación” sobre el precio del dólar.
Cabe recordar que en los últimos meses, la falta de combustibles que en Bolivia están subvencionados y la escasez de dólares han ocasionado varios bloqueos y protestas de sectores como los transportadores.
