En un golpe certero contra el crimen organizado en la región, la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) y la Fiscalía de Arica desarticularon una organización criminal dedicada al tráfico de migrantes a través de pasos irregulares en la frontera norte del país. La operación, denominada “Eslabón del Norte,” concluyó con la detención de siete personas y la incautación de un arsenal de armas, drogas y dinero en efectivo, destacando el compromiso de las autoridades en la lucha contra el crimen organizado.
La investigación, dirigida por la Brigada Investigadora de Trata de Personas de la PDI Arica y la Unidad de Trata de Personas de la Fiscalía de Arica, se desarrolló a lo largo de casi dos años, recopilando pruebas que vinculan a la organización con el tráfico de migrantes agravado y otros delitos.
Los imputados, seis chilenos (tres hombres y tres mujeres) y un ciudadano venezolano, operaban a través de una agencia de viajes establecida en el Terminal Rodoviario de Arica, desde donde coordinaban el ingreso de migrantes, principalmente desde Venezuela y Colombia, hacia la Región Metropolitana.
Operativo y Decomiso
El pasado viernes, tras obtener las órdenes de entrada y registro por parte del tribunal, se llevó a cabo un mega operativo que incluyó allanamientos simultáneos en diversos sectores de Arica, tanto en domicilios particulares como en la agencia de viajes vinculada a la organización.
Durante el operativo, las autoridades incautaron más de 12 millones de pesos en efectivo, tanto en moneda nacional como extranjera, más de 100 tarjetas SIM o chips telefónicos de distintas compañías, cinco armas de fuego, cargadores, municiones, una granada de mano y cerca de 2,5 kilos de distintas drogas, entre ellas cannabis sativa y ketamina.
El prefecto Marcelo Atala Muñoz, jefe de la Prefectura Contra el Crimen Organizado Norte de la PDI, destacó la magnitud de la operación, señalando que la organización criminal habría ingresado a más de 1.000 migrantes a través de la frontera norte, utilizando una red bien estructurada que incluía la provisión de dinero, chips telefónicos y pasajes a los migrantes para facilitar su traslado hasta su destino final en la Región Metropolitana.
Alto poder de fuego
La fiscal regional (s) de Arica y Parinacota, Paulina Brito Doerr, expresó su preocupación por el alto poder de fuego encontrado junto con la droga durante los allanamientos. “Llama la atención y también preocupa el alto poder de fuego que mantenía esta organización”.
“Además, el encontrar droga junto a este alto poder de fuego implica que hay una organización más allá del tráfico ilícito de migrantes solamente, sino que también estaría vinculada al tráfico de armas y de drogas. Por ello, destacamos este nuevo golpe al crimen organizado, luego de una ardua investigación que permitió detener a un alto número de imputados”, indicó Brito Doerr.
El delegado presidencial regional de Arica y Parinacota, Ricardo Sanzana Oteiza, valoró el trabajo coordinado realizado por la PDI y la Fiscalía de Arica. “La forma en la que se están coordinando, se están organizando, exige que nosotros como Estado también nos pongamos a la par para enfrentar esta organización, y es lo que ha ocurrido hoy”.
“Quiero felicitar el trabajo que ha desarrollado la Fiscalía Regional de Arica y Parinacota en conjunto con la Policía de Investigaciones, puesto que el resultado que hoy día tenemos no es otra cosa más que hacerse cargo de lo que nosotros entendemos como obligaciones desde la frontera del país para Chile, sino que también desde el profesionalismo que cada una de las instituciones ha puesto para nuevamente dar un golpe certero en contra del crimen organizado”, señaló Sanzana.
Formalización
Los siete imputados fueron formalizados este sábado por la Fiscalía de Arica por tráfico de migrantes agravado, entre otros delitos. El hallazgo de armas y drogas en los operativos ha abierto la posibilidad de que la organización criminal esté vinculada a actividades delictivas más amplias, lo que añade gravedad a los cargos que enfrentan.
La Operación “Eslabón del Norte” es vista como un golpe contundente al crimen organizado en la región, subrayando la importancia de la coordinación entre las diversas agencias del Estado para enfrentar y desmantelar estas redes delictivas.