La Fundación Geoglifos de Tarapacá advirtió sobre el reciente ataque al Complejo Arqueológico Alto Barranco, ubicados al sur de la comuna de Iquique, que sufrió daños irreparables a manos de motoristas.
Este monumento nacional y sitio arqueológico, que preserva iconografías andinas con más de mil años de antigüedad, fue severamente afectado por la destrucción provocada por actividades humanas irresponsables, precisamente de motoqueros y jeeperos que ocupan el cerro para transito de autos 4×4.
Mediante una declaración pública, el rector de la UNAP y presidente de la Fundación, Alberto Martínez Quezada, hizo un llamado urgente a la ciudadanía y a las autoridades para intensificar los esfuerzos de protección del patrimonio arqueológico tarapaqueño. “Cada persona debe convertirse en un actor activo en la defensa de nuestra herencia cultural”, afirmó.
La fundación ha trabajado durante casi cuatro años en la preservación de los geoglifos y otros vestigios rupestres de la región, con un fuerte enfoque en lograr que los Geoglifos de Pintados sean reconocidos como Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Recientemente, junto con la Mesa Técnica encabezada por el Gobernador José Miguel Carvajal, se presentó la solicitud para que el complejo sea incluido en la Lista Tentativa de Bienes Culturales de Chile.
En ese contexto, la ONG también ha lanzado iniciativas educativas para concienciar a la población sobre la fragilidad de estos sitios, que son vulnerables no solo al vandalismo, sino también a la falta de conocimiento sobre su valor histórico y cultural.
Revisa la declaración pública.
