La mañana de este miércoles los asistentes de la educación y apoderados del Colegio Manuel Castro Ramos de Iquique realizaron una manifestación por la falta de contratación de personal, recursos e infraestructura en el establecimiento que administra el Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Iquique.
Tras esta situación, un equipo directivo del SLEP llegó al colegio para sostener una reunión con la comunidad educativa del establecimiento y así abordar las problemáticas que afectan a los profesionales del colegio.
En una carta enviada al director del establecimiento, los profesionales indicaron que el colegio “es una comunidad grande y que tiene como sello la inclusión”. Sin embargo, este año “no cuenta con todos los profesionales que se necesitan para cubrir todas las necesidades de los estudiantes, ya que, falta la contratación de docentes de aula, docentes, técnicos y especialistas Programa de Integración Escolar (PIE), inspectores, entre otros”.
“Esta falta de personal, afecta directamente el desarrollo óptimo de las actividades escolares, ya que, los profesionales presentes, no dan abasto para poder contener y suplir las necesidades de los estudiantes, sobre todo, los que pertenecen al Programa de Integración Escolar que, en su gran mayoría, tienen diagnósticos permanentes, con dificultades severas para auto regularse, necesitando constantemente a alguien a su cargo”, agregaron.
Por último, los profesionales afirmaron que no se encuentran “bajo las condiciones apropiadas” para desempeñar su trabajo, por lo que decidieron realizar un “brazos caídos”, desde la mañana de este miércoles 26 de marzo, como manifestación del “descontento y presión para obtener respuestas a las solicitudes realizadas por el Establecimiento”.
“Los establecimientos no están siendo bien administrados”
En conversación con Radio Paulina, el dirigente de la Asociación de Funcionarios del SLEP Iquique, Juan Garcés, señaló que los asistentes de la educación están movilizándose debido a la falta de personal, recursos e infraestructura en el establecimiento educacional, lo que ha generado preocupación generalizada.
“La preocupación ya empieza a ser a nivel general, o sea, los establecimientos no están siendo bien administrados, están con muchas falencias, no están llegando el personal que necesita los establecimientos, los recursos, pero acá lo preocupante (…) es que las comunidades se están manifestando, pero después también están recibiendo las consecuencias”, añadió.
En este sentido, Garcés indicó que pese a las manifestaciones de las comunidades para mejorar la situación, los profesionales pueden enfrentar consecuencias negativas, como descuentos en los salarios de los funcionarios, lo que refleja un fallo en el servicio educativo.
El dirigente enfatizó que es crucial que los sostenedores reconozcan la necesidad de personal, ya que la falta de atención adecuada lleva a que las comunidades tengan que buscar soluciones a los problemas que el servicio debería resolver.
“El sostenedor tiene que darse cuenta de que se necesita personal, hoy en día, lo hemos dicho, nadie sobra en los establecimientos, no está faltando personal. Entonces, esto repercute después que las comunidades se tengan que movilizar para buscar soluciones de las fallas que ellos están realizando”, comentó.
Garcés indicó que un ejemplo reciente, es la situación en el Colegio Simón Bolívar de Alto Hospicio, donde el SLEP Iquique afirmó cumplir con el 100% del petitorio, sin embargo, los reclamos reflejan fallas en su parte, no de la comunidad.
“El otro día lo que pasó en el Simón Bolívar, ¿cierto?, viene el servicio y publica a través de sus redes sociales, cumplimos con el 100% del petitorio. Pero ese petitorio son cosas que tú estás fallando, no están fallando la comunidad, están fallando el servicio”, agregó.
