La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) ordenó a las autoridades peruanas abstenerse de aplicar la ley de amnistía, que favorece a militares y policías procesados por violaciones a los derechos humanos entre 1980 y 2000.
Ante esta situación, el Gobierno de la presidenta del Perú, Dina Boluarte, rechazó la medida y calificó como “inaceptable” la postura del organismo.
Según consigna el medio peruano La República, la resolución se dictó en calidad de medida cautelar con el objetivo de impedir que la ley tenga efectos legales hasta que la corte emita un fallo definitivo. Esto ocurre luego de que la mandataria promulgó la norma, pese a que el tribunal había ordenado detener su trámite.
El pronunciamiento de la corte se da en relación del seguimiento de las sentencias emitidas por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, en las que el grupo Colina asesinó a 25 personas. Ambos casos se convirtieron en casos emblemáticos de justicia internacional y motivaron la condena a 25 años de cárcel contra el expresidente Alberto Fujimori como autor mediático.
Ante este panorama, la jefa de Estado se pronunció a través de las redes sociales y señaló que el Gobierno “considera inaceptable esta decisión de la Corte IDH”. Asimismo, resaltó que el Perú es un país soberano y democrático, comprometido históricamente con el respeto a los derechos humanos.
“La Convención Americana de Derechos Humanos establece claramente que el Sistema Interamericano de Derechos Humanos tiene un carácter subsidiario, coadyuvante o complementario, y no puede intervenir mientras no se haya agotado la jurisdicción interna”, agregó.
Esta respuesta surge luego de que la corte ordenara a los jueces peruanos no aplicar, por ahora, la ley de amnistía promulgada por la presidenta Dina Boluarte tras su aprobación en el Congreso. La medida busca impedir que esta norma tenga efectos legales hasta que el tribunal emita una decisión definitiva sobre el caso.
