La artesana aymara y agricultora Adriana Sabina Mamani Castro (62), oriunda de Colchane, Región de Tarapacá, fue una de las siete galardonadas con el prestigioso Sello de Excelencia a la Artesanía 2025 por su obra, la Piecera Ikiña.
La distinción fue entregada por el Comité Nacional de Artesanía, integrado por el Ministerio de las Culturas y la Escuela de Diseño de la UC, en una ceremonia realizada en la Biblioteca Nacional de Santiago. El reconocimiento distingue obras que cumplen con altos criterios de calidad, innovación, sustentabilidad y potencial comercial.
El director nacional de INDAP, Santiago Rojas, celebró el logro de la tejedora tarapaqueña, destacando el rol de la institución en el apoyo a este rubro a través de asesoría, capacitación e inversión.
La Piecera Ikiña, que tomó tres meses en ser confeccionada, es una innovadora frazada hecha en telar de cuatro estacas con fibra de alpaca natural, utilizando colores que van del blanco al negro. La pieza incorpora trenzas de la faja aymara como flecos y una costura ancestral en la mitad.
Mamani, quien actualmente vive en Pisiga Centro, explicó que la iconografía de su obra representa el cerro y el agua, elementos vitales de la naturaleza altiplánica.
“Yo me siento orgullosa y feliz de ser una maestra artesana y este es un reconocimiento por los más de 50 años que llevo en esto. Me emociona saber que con esta obra dejo un pedacito de mí para que lo vean mis hijos, nietos, otras generaciones”, comentó Mamani, quien aprendió el oficio de su madre, abuela y tías, comenzando a tejer a los 8 años.
La artesana, que plasma en sus tejidos los animales y la naturaleza que ve en el campo, afirmó que este oficio le permitió educar a sus hijos y la ha ayudado “toda la vida”.
Esta no es la primera distinción de Adriana Mamani, quien en 2022 recibió el Sello Artesanía Indígena y en 2024 el Premio Iberoamericano de Textiles y Cestería en Ecuador.
Junto a ella, también fueron reconocidos otros seis artesanos, incluyendo a Pilar Quispe de Pozo Almonte.



