En una sesión extraordinaria de la Comisión Integrada del Consejo Regional —que reúne a las comisiones de Medioambiente, Presupuesto, Turismo, Rural y Seguridad— los consejeros presentes, concordaron en solicitar declarar Zona de Catástrofe el Lago Chungará y que la Cancillería de Chile intervenga ante el desastre ambiental provocado por el derrame de 25 mil litros de aceite de soya, proveniente de un camión boliviano que transitaba por la Ruta Internacional 11-CH.
Ambas propuestas surgieron en el marco de la citada comisión, oportunidad en que asistieron el director regional de Senapred, Javier Carvajal; el representante de Conaf, Lino Antezana; la seremi del Medio Ambiente, Carmen Tupa; y la delegada provincial de Parinacota, Olga Testa, quienes expusieron los avances, acciones y desafíos en torno al proceso de contención y mitigación del daño ecológico.
El consejero regional Carlos Ojeda, quien presidió la sesión, destacó el carácter inédito de la instancia y la urgencia de medidas excepcionales.
“Estamos en presencia de una situación gravísima que requiere ser declarada zona de catástrofe. No basta con soluciones parciales. Ya existe un diagnóstico técnico que demuestra impactos a largo plazo que demandarán recursos económicos, técnicos y humanos especializados”, afirmó.
Por su parte, el consejero Hermes Gómez subrayó la magnitud del impacto en la Reserva de la Biosfera y dijo que “hay un daño importante y sin precedentes que afecta la cadena ecosistémica del lago. La declaración de zona de catástrofe permitiría acceder a apoyo regional y nacional para la recuperación de un ecosistema gravemente afectado”.
Preocupación por control fronterizo y responsabilidad internacional
Los consejeros coincidieron en la necesidad de que la Cancillería intervenga, dada la arista internacional del siniestro. Manifestaron preocupación por el aumento del tránsito de camiones bolivianos por la Ruta 11-CH y la falta de control respecto del tipo de carga que ingresa al país.
“No existe fiscalización adecuada del transporte que ingresa desde Bolivia ni del que sale desde nuestro puerto. Este descontrol debe corregirse de inmediato”, enfatizó Ojeda.
Impacto ecológico podría extenderse por 50 años
El científico Freddy Sebastián Medina, presente en la sesión, respaldó la solicitud de declarar zona de catástrofe y explicó que las acciones actuales —a cargo de una empresa contratada con recursos de emergencia— se concentran en contener la expansión del derrame y limpiar áreas críticas.
La autoridad indicó que se requieren dos meses de investigación intensiva para obtener un diagnóstico completo del ecosistema afectado y que el daño podría persistir por hasta 50 años si no se ejecuta un plan de remediación adecuado.
Asimismo, fue propuesta la idea de instalar de forma urgente un hospital de fauna silvestre para evaluar, tratar y rehabilitar a las especies impactadas por el derrame.
Próximas acciones
Los miembros de la Comisión Integrada acordaron convocar a una segunda sesión, ampliando la participación a representantes de la sociedad civil, organizaciones ambientales, el mundo académico y otras instituciones especializadas, con el fin de reunir más antecedentes técnicos y coordinar nuevas acciones para la recuperación integral del Lago Chungará.



