El 4° Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó este lunes al exdirector general de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa, a 17 años de presidio efectivo por su responsabilidad en una serie de delitos cometidos durante su gestión al frente de la institución.

La sentencia incluye las penas por los delitos consumados y reiterados de malversación de caudales públicos mediante el uso irregular de gastos reservados, falsificación y uso malicioso de instrumento público, y lavado de activos. Del total de la condena, se descontarán los más de cuatro años que Espinosa ya cumplió en prisión preventiva y arresto domiciliario.

Además de la pena de cárcel, el tribunal acogió la demanda civil interpuesta por el Consejo de Defensa del Estado (CDE), ordenando al exjefe policial el pago de $146 millones de pesos al Estado en concepto de indemnización por daño emergente.

Como parte de las medidas complementarias, se decretó el comiso de una propiedad de Espinosa ubicada en la comuna de Las Condes, la cual será utilizada para cubrir la deuda derivada de la condena.

Rol de la cónyuge

María Magdalena Neira, cónyuge de Héctor Espinosa, también fue condenada por el delito culposo de lavado de activos, en el marco del mismo esquema de desvío de fondos públicos.

La investigación reveló que entre los años 2015 y 2017 se realizaron 53 depósitos en efectivo por un total de $146 millones de pesos, que fueron traspasados desde los fondos reservados de la PDI a cuentas personales del exdirector y su entorno.

Con esta condena, culmina un extenso proceso judicial que marcó un precedente en la historia de la institución policial y de la rendición de cuentas en el uso de fondos públicos. La sentencia reafirma la responsabilidad penal y civil de quienes administran recursos fiscales, incluso en cargos de alta dirección y confianza estatal.