El expresidente de Bolivia, Luis Arce, calificó su aprehensión durante la tarde del miércoles 10 de diciembre como una acción absolutamente irregular e ilegal, similar a un secuestro en épocas de dictadura fascista.
En la audiencia virtual de medidas cautelares que se realizó la semana pasada, la Fiscalía sostuvo ante el juez que existen riesgos procesales de fuga y de obstaculización en la investigación, además de suficientes indicios de participación de Arce en decisiones que derivaron en el desvío irregular de recursos públicos del Fondo Indígena. Con todo, la justicia de Bolivia determinó cinco meses de detención preventiva para el exmandatario.
Por su parte, el también ex ministro de Economía en el gobierno de Evo Morales rechazó todas las acusaciones en su contra y se declaró ante el juez como “absolutamente inocente” y aseguró que él nunca participó de las reuniones del directorio del Fondo Indígena.
“Quiero hacer notar lo irregular e ilegal de mi aprehensión (…) Podía haber sido un secuestro, podía haber sido cualquier situación absolutamente irregular. Es un hecho absolutamente irregular, propio de las épocas fascistas de 1979 a los 80 donde la dictadura militar utilizaba ese tipo de vehículos para atentar contra nosotros”, añadió.
En su declaración, Arce denunció que fue aprehendido por unos cuatro a cinco encapuchados que se bajaron de un minibús y le “invitaron” a subirse al mismo porque estaba siendo aprehendido, que no le mostraron ninguna orden para tal efecto.
El ex jefe de Estado subrayó que él no participaba de las reuniones del directorio del Fondo Indígena, que él designaba, mediante resolución ministerial que llevaba su firma a algún funcionario y que la única vez que participó fue por casualidad y que no tiene conocimiento del acta de esa reunión que fue en Tarija.
“No es la persona la que participa del directorio como lo han mencionado mis abogados, sino es el ministerio como tal y se representaba y se designaba con una resolución ministerial a esa persona que iba en representación del ministerio a ese tipo de reuniones, por lo tanto, yo no he participado prácticamente en el 99% de todas, esas reuniones”, insistió.
La exautoridad atribuyó su detención a cuestiones enteramente políticas del Gobierno de Rodrigo Paz por la coyuntura política que “busca chivos expiatorios, busca encubrir lo que está pasando”.



