Los diputados de la Comisión de Gobierno Interior aprobaron el articulado del proyecto de ley sobre migración y extranjería, una iniciativa que contiene, entre otros, temas relativos a la expulsión y el retorno asistido; las medidas de control administrativo; y las funciones que corresponderán al Ministerio del Interior y a la subsecretaria, en términos de la institucionalidad migratoria.
De acuerdo a lo informado por la Cámara, hubo algunos artículos que no fueron aprobados y que deberán ser analizados o reincorporados en la sala, como detalló la diputada Marcela Hernando (PRSD), al referirse a la conformación del Consejo Asesor Presidencial.
“Rechazamos la conformación del Consejo Asesor del Presidente, porque estimamos que les faltaban algunos integrantes. Algunos parlamentarios insistían en que hubiera miembros de la sociedad civil y otros que no, entonces, finalmente eso quedó con un vació ya que desde nuestro punto tiene que estar integrada la sociedad civil”, sostuvo.
En materia laboral, uno de los puntos de discusión fue el porcentaje de extranjeros en empresas de mayor o menor tamaño.
“Nosotros estuvimos de acuerdo en que se modifique el límite que hoy día establece un piso de 85% para trabajadores chilenos. Esto se modificó de manera que, mínimo, el 60% sean chilenos, pero esto no implica que los extranjeros sean el 10% o el 20%”, afirmó.
Con respecto a la expulsión, la parlamentaria dijo que su sector estuvo de acuerdo con flexibilizar aquellos aspectos ligados a facilitar la cautela de los derechos de los migrantes y, si bien reconoció que hubo algunos desacuerdos con Chile Vamos, destacó que la mayoría de los artículos en ese orden fueron votados de manera unánime con discrepancias mínimas.
Para el diputado Celso Morales (UDI), el proyecto obtuvo elementos muy relevantes para la realidad migratoria en Chile, pero admitió que en otras se quedó “al debe”, como por ejemplo respecto a lo expuesto por los municipios, en cuanto a los problemas que hay hoy en materia de vivienda para los migrantes, “que hoy es una situación grave”.
Por otro lado, graficó las dificultades de los profesionales migrantes que hoy no pueden desempeñarse en sus respectivos ámbitos por diferentes situaciones.
“Lo positivo es que, de una vez por todas, se empieza a ordenar el tema de la migración. Va a quedar claramente establecido que aquel que tenga la intención de venir a Chile con la intención de encontrar trabajo tiene que hacer su trámite correspondiente en el consulado respectivo y vamos a sincerar lo que hace en el país”, planteó.
El proyecto, que ahora deberá continuar su tramitación en la Comisión de Hacienda antes de ser debatido en la Sala de la Corporación, subraya la necesidad de apuntar hacia la migración regular como única vía para la integración plena, de manera que el migrante desarrolle su vida en las mejores condiciones posibles.