El Gobierno repudió y condenó “el brutal ataque perpetrado al Hospital Bautista Al-Ahli Arab, ubicado en Gaza, que ha dejado hasta este momento centenares de muertos y heridos”.
A través de un comunicado, el Ejecutivo manifestó que “el ataque a un centro hospitalario constituye una grave violación al Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario, los cuales deben ser respetados sin excepción”.
“Su incumplimiento constituye un atentado contra la dignidad de las personas, poniendo además en riesgo la paz y la seguridad mundial. Este hecho puede constituir un crimen de guerra que debe ser investigado por las autoridades nacionales e internacionales competentes”, expresaron en el documento.
Además, el Gobierno indicó que “nuestro país hace llegar sus condolencias a las familias de las víctimas, como también expresa su plena solidaridad y apoyo al pueblo de Palestina en este difícil momento”.
“Chile formula un llamado al cese inmediato de las hostilidades y reafirma su compromiso para que se retome de forma urgente el proceso de paz entre ambas partes, conforme al Derecho Internacional y las resoluciones emanadas de Naciones Unidas”, enfatizaron.