En medio de la polémica desatada por la autorización de videollamadas desde la Cárcel de Alta Seguridad a personas vinculadas al Tren de Aragua, el ministro de Justicia, Luis Cordero, sostuvo una reunión este lunes con el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco.
Durante el encuentro, Cordero expresó su preocupación respecto a la decisión del juez Daniel Urrutia, quien permitió estas comunicaciones telemáticas desde el penal. El ministro enfatizó que dicha medida “infringe las normas que regulan el derecho penitenciario”, señalando que existen razones para considerarla ilegal.
El secretario de Estado hizo hincapié en que las regulaciones de establecimientos de alta seguridad como la Cárcel de Alta Seguridad exigen una restricción absoluta de las comunicaciones telemáticas, especialmente con personas fuera del país.
Cordero afirmó que si bien el derecho de las personas privadas de libertad a recibir visitas no está en discusión, la posibilidad de comunicación telemática desde este tipo de establecimientos compromete su seguridad.
En opinión de Gendarmería y del Gobierno, esta situación representa un riesgo para la seguridad del penal y su condición de máxima seguridad. En ese sentido, este encuentro entre el ministro de Justicia y el presidente de la Corte Suprema buscó abordar esta controversia y tomar medidas para garantizar el cumplimiento de las normativas penitenciarias y la seguridad de los establecimientos carcelarios.
En medio de la polémica desatada por la autorización de videollamadas desde la Cárcel de Alta Seguridad a personas vinculadas al Tren de Aragua, el ministro de Justicia, Luis Cordero, sostuvo una reunión este lunes con el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco.
Durante el encuentro, Cordero expresó su preocupación respecto a la decisión del juez Daniel Urrutia, quien permitió estas comunicaciones telemáticas desde el penal. El ministro enfatizó que dicha medida “infringe las normas que regulan el derecho penitenciario”, señalando que existen razones para considerarla ilegal.
El secretario de Estado hizo hincapié en que las regulaciones de establecimientos de alta seguridad como la Cárcel de Alta Seguridad exigen una restricción absoluta de las comunicaciones telemáticas, especialmente con personas fuera del país.
Cordero afirmó que si bien el derecho de las personas privadas de libertad a recibir visitas no está en discusión, la posibilidad de comunicación telemática desde este tipo de establecimientos compromete su seguridad.
En opinión de Gendarmería y del Gobierno, esta situación representa un riesgo para la seguridad del penal y su condición de máxima seguridad. En ese sentido, este encuentro entre el ministro de Justicia y el presidente de la Corte Suprema buscó abordar esta controversia y tomar medidas para garantizar el cumplimiento de las normativas penitenciarias y la seguridad de los establecimientos carcelarios.