El pasado domingo 17 de marzo, la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Iquique (BRIANCO IQQ) gestó una emotiva ceremonia en el cementerio “Parque del Sendero”, para conmemorar un nuevo aniversario del fallecimiento del mártir institucional detective José Cubillos Rivera, quien cumplió con la máxima promesa de servicio: “combatir la delincuencia hasta rendir la vida si fuese necesario”.
El homenaje contó con la presencia del Prefecto Marcelo Atala, jefe de la Prefectura Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Norte, el Prefecto Inspector Cristian Lobos, jefes de unidades dependientes, funcionarios, ex compañeros de trabajo y amigos de Cubillos, como también integrantes de su familia.
Al cumplirse 27 años de su trágica muerte, el subprefecto Javier Rodríguez, subjefe de la BRIANCO IQQ, señaló que “el detective José Cubillos, en un acto enmarcado en el compromiso, la convicción de sus ideales, el respeto a la Ley, a la sociedad chilena y el amor hacia su trabajo, partió de este mundo para alcanzar la Brigada celestial”.
En la ocasión, se hizo referencia a la gran labor que realizó, quien demostró a lo largo de su carrera policial sus virtudes como investigador, haciéndolo merecedor de innumerables reconocimientos, lo que generó admiración entre sus pares y destacados resultados en las diversas investigaciones antinarcóticos en las cuales participó, y que fue precisamente en una de esas donde el 17 de marzo del año 1997, perdió la vida al enfrentar a un peligroso traficante de drogas, convirtiéndose así en el mártir número 44 de la institución y el primero de la BRIANCO, la cual hasta hoy lleva orgullosa su nombre.
Su hermana, Katya Cubillos, agradeció el homenaje rendido a su fallecido hermano, a quien recuerda como un hombre justo, amante de su trabajo, de gran vocación y entrega.
Horas más tarde, los detectives y familiares se trasladaron hasta el lugar donde se encuentra el monolito en su memoria, oportunidad en que fue recordado como un hombre que poseía una gran vocación de servicio público, cumpliendo con sacrificio, tenacidad y convicción una misión clara y definida mandatada por la Ley, siendo un ejemplo para las nuevas generaciones que integran la institución.