El martes el canciller boliviano, Fernando Aramayo, sostuvo una reunión de trabajo con el cónsul general de Chile en La Paz, Fernando Velasco, en un encuentro que se desarrolló en un marco de “respeto mutuo, buena vecindad y apertura al diálogo”.
Según informó el Ministerio boliviano de Relaciones Exteriores, en la cita se abordaron temas de interés común y entre ambas autoridades diplomáticas ratificaron la voluntad de ambos gobiernos de avanzar “de manera gradual” en una agenda orientada al beneficio compartido.
La Cancillería de Bolivia no detalló los puntos específicos de la nueva agenda bilateral, pero indicaron que el encuentro de las autoridades se enmarca en los principios de buena vecindad, cooperación, respeto e integración.
En ese marco, se intercambiaron criterios sobre temas de interés común, destacando la voluntad de mantener canales diplomáticos fluidos, transparentes y responsables, en concordancia con las prioridades e institucionalidad de ambos países.
“La Cancillería boliviana reafirma su disposición de seguir trabajando con Chile, guiada por los principios de buena vecindad, respeto, cooperación e integración”, agregaron en un comunicado.
Ambos países buscan retomar el diálogo diplomático formal en una agenda de trabajo que permitirá reconstruir la relación bilateral, dejando atrás el periodo de parálisis que dejó a la relación anclada en los dos litigios ante la Corte Internacional de Justicia.
La primera señal en este proceso de reactivación del diálogo bilateral se dio con la asistencia del presidente Gabriel Boric a la toma de juramento del mandatario boliviano, Rodrigo Paz.
Además, el pasado 9 de noviembre, un día después de ese evento, el canciller Alberto van Klaveren conversó por teléfono con autoridades del país altiplánico para sentar las bases de la nueva agenda.
