La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) valoró ampliamente la reforma previsional implementada en Chile en su informe “Pensions at a Glance 2025”, señalando que representa uno de los avances más importantes de la región para fortalecer los ingresos en la vejez, especialmente para las mujeres, y consolidar un sistema más robusto y sostenible.
Según el organismo internacional, las medidas aprobadas este año permitirán elevar de manera sustantiva las pensiones actuales y futuras, acercando la tasa de reemplazo del país —relación entre pensión y salario promedio en la vida activa— a los niveles del promedio OCDE. El estudio estima que Chile alcanzará una tasa cercana al 61%, lo que representa un salto significativo y deja al país muy próximo al estándar internacional.
La OCDE destacó que Chile “mejoró las pensiones basadas en ingresos y fortaleció la protección para personas mayores de bajos ingresos”, subrayando el impacto de la Pensión Garantizada Universal (PGU), cuyo incremento del 11,6% y actualización por precios permitirá subir las pensiones totales entre 3,2% y 5,2%, dependiendo del nivel de ingresos.
El informe también relevó los componentes redistributivos de la reforma, especialmente los dirigidos a mujeres, como el complemento por diferencia de expectativa de vida. Según la organización, esta medida corregirá un problema estructural: “La reciente reforma eliminará el impacto negativo de la mayor longevidad de las mujeres en sus pensiones”, lo que permitirá reducir la brecha de género previsional, que aún alcanza un 23% en promedio en los países miembros.
Asimismo, el organismo valoró el aumento gradual de la cotización del empleador, que pasará del 1,5% al 8,5% hacia 2034, destinando 4,5 puntos porcentuales a cuentas individuales y 1,5 puntos a nuevos beneficios contributivos, como el bono por años cotizados.
El documento también pone de relieve los avances del país en índices internacionales de pensiones para mujeres, donde Chile subió al puesto 16 entre 35 sistemas evaluados, superando el promedio de la OCDE y mejorando tres posiciones en la última década.
El reporte constituye un respaldo técnico significativo a la reforma previsional impulsada por el Gobierno, que tras más de diez años de intentos legislativos logró actualizar el sistema. En su conclusión, la OCDE sostiene que las medidas aprobadas “serán clave para avanzar hacia pensiones más justas, reducir desigualdades estructurales y asegurar la sostenibilidad del sistema en el largo plazo”.
