Un hecho histórico ocurrió esta jornada en el mercado del petróleo, pues el precio del barril WTI cerró en -US$ 37,63 en el mercado de futuros, es decir, un desplome de 305,97% en relación al viernes pasado. Hace unos días el gerente general de Enap, Andrés Roccatagliata, había advertido sobre la situación de la industria petrolera, en la que se vive una “tormenta perfecta”.
¿La explicación? La sobreoferta de petróleo, la abrupta baja en la demanda a nivel global y el hecho de que los productores no se hayan puesto de acuerdo en una reducción del volumen necesario, ha generado que los niveles de stock en todo el mundo estén muy altos y la capacidad de almacenamiento copada.
Prueba de lo anterior, es que se están utilizando los buques petroleros como almacenes. “La utilización de estos buques para almacenamiento ha generado un importante encarecimiento del flete, lo que le resta atractivo a traer más petróleo en este contexto”, sostuvo Enap.
Desde la estatal agregaron que Chile no está ajeno a esta realidad, ya que hoy el almacenamiento es superior al promedio normal. “En Enap quisimos prevenir y, cuando el Covid-19 se convirtió en una amenaza global, adquirimos un stock de productos refinados adicionales para no depender de terceros y que nos permite estar confiados respecto a nuestra capacidad para mantener un suministro y un abastecimiento continuo en el país”, manifestaron.
El efecto que está teniendo esto en el mercado chileno son las consecutivas rebajas en el precio de las gasolinas (últimas 12 semanas). Así, desde Enap aseguraron que “si se mantienen las mismas condiciones, podríamos seguir observando nuevas semanas con disminución en el precio, pero hay que estar muy atento al mercado y la reacción de los países productores, todavía hay alta incertidumbre y los marcadores se han mostrado volátiles en reacción a esa condición”.