El Departamento de Aseo y Ornato de la municipalidad de Alto Hospicio, a través de la Oficina de Medio Ambiente, realizó capacitaciones y un proceso de fiscalización a quienes operan los 25 camiones aljibes particulares que reparten agua en distintos puntos de la ciudad.
La iniciativa apunta a asegurar el cumplimiento sanitario de los estanques transportadores para que el agua de beber llegue con un estándar de calidad a las más de seis mil familias en situación de vulnerabilidad que requieren del vital elemento, aseguró el encargado de la Oficina de Medio Ambiente, Edgar Ortega.
Indicó que en esta oportunidad fueron revisadas las certificaciones de los estanques para asegurar la calidad de los mismos y que éstos cumplan las normativas vigentes.
Asimismo, explicó que como el municipio entrega el beneficio del agua sin costo para quienes la reciben, se hace responsable de fiscalizar los camiones particulares que la distribuyen en las diferentes tomas. “Actualmente se reparten 4 mil litros mensuales a cada una de las familias que allí habitan”, afirmó.
Ortega dio a conocer que en el último tiempo, en el contexto de la pandemia, ha aumentado en más de un 10% la cantidad de familias viviendo en situación de tomas en Alto Hospicio, “obligando al municipio a redoblar sus esfuerzos en asistencia y suministro de agua potable a quienes no tienen un techo donde vivir”.
Por otra parte, el funcionario municipal hizo un llamado a la comunidad a denunciar cualquier anomalía en el funcionamiento de los camiones repartidores para fiscalizar y si así lo amerita, dar de baja al camión del sistema de entrega.