El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Arica condenó a Hernán Alejandro Pastene Flores a la pena de 15 años y un día de presidio efectivo, en calidad de autor de dos delitos consumados de robo con intimidación perpetrados en septiembre de 2018, en la ciudad.
En fallo unánime, el tribunal aplicó, además, a Pastene Flores las medidas accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure su condena; más el pago de las costas del juicio.
La resolución dio por acreditado, que aproximadamente a las 15:00 horas del 20 de septiembre de 2018, “en circunstancias que la víctima de iniciales R.A.P.S., conducía el vehículo tipo bus de la locomoción colectiva, marca ASHOCK, P.P.U KGKS.98, por calle Chapiquiña en dirección al norte de esta comuna, al llegar a la intersección de calle Carlos Tello, lo hizo parar el acusado, ya individualizado, quien luego de pagar el pasaje se sentó en la mitad del bus. En los instantes que el vehículo transitaba en la intersección de avenida Loa con calle Barros Luco se bajó el último pasajero, momento que el acusado se cambió de asiento, y al llegar a calle Tranque con la intersección de calle Tambo Quemado, el acusado se levantó de su asiento y le señaló a la víctima: ‘aquí me bajo yo’, una vez que la máquina estaba detenida el acusado se abalanzó sobre la víctima, con una mano le agarró la cabeza y lo presionó contra el volante de la máquina para luego intimidarlo colándole en la espalda un objeto punzante señalándole: ‘pásame la plata’, respondiéndole la víctima ‘que no tenía más plata, sólo la que tenía en la caja’, insistiendo el acusado ‘ya pasa la plata si te tengo cachado’, metiendo su mano en el bolsillo de la polera de la víctima y sustrayéndole, con ánimo de lucro y sin la voluntad de su dueño, la suma de $15.000 para luego el acusado bajarse del bus y huir del lugar”.
Alrededor de media hora después, “en circunstancias que la víctima R.A.J.A., conducía el bus del recorrido N° 2 hacia el paradero del Agro y cuando iba por calle Chapiquiña al llegar a la intersección del pasaje Río Tello de la comuna de Arica, lo hace parar el acusado, ya individualizado, quien le manifestó a la víctima que iría a comprar comida pagándole el pasaje, colocándose detrás de la víctima señalándole que venía de Iquique y que era choro, siguiendo su recorrido el bus y al llegar a calle Francisco de Bilbao con calle Tucapel, el acusado se abalanzó sobre la pecera, lugar donde mantenía dinero la víctima, y con ánimo de lucro y sin la voluntad de su dueño, comenzó a sustraer dinero con su mano izquierda específicamente la suma de $20.000, mientras mantenía la mano derecha en la cintura haciéndole creer a la víctima que mantenía un cuchillo, intimidándolo mientras le gritaba: ‘yo soy choro’, para luego huir con el dinero en su poder”.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.