En la sesión N° 32 de la Convención Constitucional, que se realizó a partir de las 09.30 horas de este miércoles, intervinieron 37 constituyentes. La convencional por Tarapacá, Alejandra Flores, lo hizo en el lugar 35, expresando que se debe construir un Estado descentralizado, con equidad territorial, que además sea participativo, anticorrupción, feminista, paritario, antipatriarcal y antirracista.
Propuso que las autoridades electas estén sujetas a un mandato revocatorio, es decir, si no cumplen con su mandato, deben abandonar el cargo. Luego compartió otras medidas que debieran considerarse en la elaboración de la nueva constitución.
Que el pueblo chileno cuente con mecanismos de participación directa como plebiscitos e iniciativas de ley ciudadana.
Asimismo, incorporar las bases para inaugurar un Estado plurinacional e intercultural, con reconocimiento y protección de la autonomía y libre determinación de los pueblos originarios, sus lenguas y culturas. Y en este sentido, no olvidar al pueblo tribal afrochileno, y que esa memoria permita reparar siglos de injusticia e invisibilización.
También expuso proteger la tierra y el agua hoy amenazados por el extractivismo y transitar hacia la soberanía alimentaria y la restauración de los ecosistemas dañados.
Por último, si bien Flores fue electa por escaños generales, es aymara, por lo tanto, afirmó con fuerza y emoción “que los valores y principios más profundos del milenario pueblo aymara; valores que propenden al equilibrio, al Suma Qamaña o Buen vivir, deben quedar plasmados en la nueva Carta Magna, expresando una nueva forma de convivencia ciudadana en diversidad y armonía con la naturaleza”.