El alcalde de Arica, Gerardo Espíndola, planteó durante el Consejo Comunal de Seguridad Pública de este lunes su preocupación por los reiterados hechos de sangre que han ocurrido en la ciudad, situación que según indica, requiere de medidas para fortalecer el control de armas y la detención de los antisociales.
La discusión se tomó la agenda local luego que la semana pasada, un hombre falleciera tras ser acribillado al interior de un vehículo en Cancha Rayada. Para el jefe comunal, la preocupación obedece a que hechos como estos son más que parte de una percepción, evidenciando una escalada de violencia que tiene intranquila a la ciudadanía.
Precisó que los municipios de Chile no tienen injerencia en la seguridad, por cuanto es responsabilidad del ministerio del Interior que mediante sus delegaciones presidenciales, establece las acciones tendientes a prevenir y controlar la delincuencia.
Sin embargo, aseguró que como municipalidad es posible aportar a la labor de las policías y la Fiscalía, mediante iniciativas como la Central de Cámaras de Televigilancia, que han permitido detectar delitos en progreso y grabar imágenes que han resultado cruciales en diversas causas penales.
Durante el consejo, desde el Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos de la Fiscalía de Arica y Parinacota señalaron que las estadísticas arrojan un aumento del uso de armas de fuego en los últimos dos años, por lo cual se designó un fiscal a cargo de todas las causas similares.
Al mismo tiempo, la unidad puso a disposición las estadísticas, que incluyen georreferenciación de los hechos delictuales, que permitirían al municipio poder destinar recursos y herramientas de manera más eficaz.
En este sentido, el alcalde Espíndola señaló que ahora levantarán estos datos para generar insumos que permitan al municipio tomar decisiones en espacios donde sean útiles para las policías y la Fiscalía.