El Juzgado de Garantía de Alto Hospicio decretó la prisión preventiva para los cuatro imputados por el homicidio del paramédico Sebastián Zúñiga, ocurrido el pasado 24 de enero, en el sector del Mirador de la comuna.
Cerca de las 4:30 de la madrugada de dicha fecha, los imputados descendieron del vehículo, a excepción del conductor, para sustraer los teléfonos celulares de la víctima, quien se encontraba al interior de un automóvil junto a otra víctima.
En ese contexto, los acusados intimidaron a ambos individuos con un arma de fuego que mantenía el autor del homicidio, de iniciales A.V.T, además de bajar a la fuerza a Zúñiga, a quien golpearon en diferentes partes del cuerpo y efectuaron un disparo al aire a fin de intimidar a los afectados, logrando la sustracción del teléfono celular de la acompañante de Sebastián.
Para evitar el robo, Zúñiga opuso resistencia, ante lo cual se efectuaron en su contra dos disparos, hiriéndole en el tórax y causándole posteriormente la muerte, a raíz de una hipovolemia aguda traumática.
Durante la audiencia de formalización, el fiscal jefe de Iquique, Eduardo Ríos, explicó que el día de los hechos, los imputados A.V.T., de 27 años, F.G.C., quien era carabinero
al momento del delito, de 27 años, L.R.R. de 21 años y M.H.T., de 21 años, se dirigieron hasta el sector del Mirador de Las Banderas a bordo de un móvil, conducido por el carabinero con el fin de sustraer especies.
En tanto, la Fiscalía formalizó por los delitos de robo con homicidio y disparo injustificado en la vía pública a los cuatro imputados chilenos detenidos por la Policía de Investigaciones, por su participación en la muerte del joven.
Además, el fiscal Ríos dio cuenta de las diligencias realizadas por funcionarios de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Iquique y precisó que una de las diligencias fue el análisis de las cámaras de seguridad del sector, las cuales permitieron ubicar el vehículo en que se movilizaban los imputados, siendo este encontrado afuera de un domicilio de Pozo Almonte.
Respecto a este hecho, el dueño indicó que el vehículo se lo había vendido al carabinero F.G.C., pero que se lo había devuelto posterior a los hechos. También se obtuvo la declaración de un testigo reservado, que conocía al imputado A.V.T. y lo había visto una semana antes de los hechos con un arma de fuego que dijo haber comprado en un millón de pesos, teniendo un contacto con él posterior al homicidio, señalándole que se iba a ocultar porque se había “mandado un cagazo”.
Tras el reconocimiento fotográfico de A.V.T. por parte de la víctima sobreviviente, se logró la detención del imputado, quien reconoció su participación en el homicidio y dio los nombres de los otros dos partícipes, quienes fueron detenidos posteriormente, igual que el carabinero F.G.C. El Ministerio Público precisó que los imputados A.V.T. y L.R.R., contaban con una condena previa por un delito de robo con intimidación ocurrido en la misma comuna de Alto Hospicio.
Dada la gravedad de los hechos y de la pena asignada a los delitos, el fiscal solicitó la prisión preventiva de los imputados por ser su libertad un peligro para la seguridad de la sociedad, lo que fue acogido por el Juzgado de Garantía, pese a la oposición de las defensas y se fijó un plazo de investigación de 120 días.
Este caso forma parte de los homicidios que fueron asignados por el Fiscal Nacional, Ángel Valencia, al Fiscal Regional Raúl Arancibia, como fiscal preferente para la investigación de estos delitos, junto a al equipo multidisciplinario que llegó a Tarapacá por la Policía de Investigaciones.