El pasado miércoles, la ministra del Interior, Carolina Tohá, señaló el plan que tiene el Gobierno para poder concretar las expulsiones de extranjeros que se encuentran irregulares en Chile.
La secretaria de Estado afirmó que “este año, hace pocas semanas, se acaban de suplementar los recursos para expulsiones en 1.400 millones de pesos. Eso nos va permitir contratar dos vuelos comerciales y tener adicionalmente un vuelo de la FACh, dirigidos en dos casos a Venezuela y en el tercer caso a algún otro país, probablemente República Dominicana o Colombia”.
Además señaló, que “adicionalmente a eso, todas las semanas hay personas que son expulsadas en vuelos comerciales”.
El en la jornada del martes, en la comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados, el director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Thayer, dijo que las expulsiones dependen de la capacidad que tengas los aviones, ya que hay algunos de los vuelos de la Fuerza Aérea que tienen capacidad para 60 personas, como hay vuelos comerciales que tienen capacidad para 120 personas.
Por otro lado, la ministra Tohá apuntó que la dificultad de las expulsiones es que “la legislación internacional exige que por cada persona que se expulsa haya dos personas de la policía que los escoltan. Entonces, efectivamente esto tiene costos muy importantes, porque hay que pagar esos pasajes también, y distrae funcionarios”.
A pesar de esta dificultad, la autoridad del Interior aseguró que “eso no es un obstáculo para expulsar. En todo este tiempo, no hemos estado limitados por los recursos ni por los funcionarios, lo que nos limita son los requisitos que son tan complejos”.
La ministra indicó que los vuelos de expulsión no se harán públicos como en el Gobierno del expresidente Sebastián Piñera, la secretaria de Estado afirmó que “creemos que no es necesario, es como un morbo que no ayuda”.