La Fiscalía Regional de Tarapacá confirmó que investiga un presunto robo con homicidio ocurrido en la localidad de Quebe, comuna de Colchane, luego de que una mujer de 85 años, identificada con las iniciales Maximiliana Amaro Mamani, fuera hallada sin vida al interior de su vivienda.
Según informó el fiscal jefe del Tamarugal, Hardy Torres, “se dispuso que el Servicio Médico Legal concurriera al lugar para determinar la causa de muerte y que personal de la Brigada de Homicidios y del Laboratorio de Criminalística de la PDI se trasladaran hasta la localidad a objeto de indagar antecedentes que permitan esclarecer las circunstancias del deceso”.
De acuerdo al informe preliminar, entregado por el subprefecto Christian Sayago, jefe de la Brigada de Homicidios de Iquique, la víctima vivía sola y era conocida en la comunidad por su trabajo en la agricultura y la ganadería. El hallazgo fue realizado por una de sus nietas, luego de que un vecino advirtiera que no la veían desde el viernes 11 de abril. La joven llegó hasta la vivienda el lunes por la mañana y encontró el cuerpo de su abuela tendido en el piso del dormitorio.
Los detectives constataron que el inmueble presentaba un evidente desorden, atribuible a un registro por parte de terceros. Además, faltaban pertenencias, dinero y documentos de la víctima, lo que refuerza la hipótesis de un robo.
La autopsia realizada por el Servicio Médico Legal confirmó que la mujer falleció producto de un traumatismo encéfalo craneano (TEC) cerrado, lo que establece la participación de terceros y confirma que se trató de un delito.
A través de redes sociales, la Asociación Indígena de Quipisca y familiares de la víctima denunciaron un abandono por parte del Estado, acusando que Maximiliana había advertido amenazas previas en su contra. “Años atrás alertó que fue encañonada con una pistola cuando denunció el paso incontrolado de extranjeros indocumentados por nuestro territorio, y también denunció robos sufridos en su hogar. A pesar de haber recurrido a las autoridades correspondientes, no recibió protección”, señalaron en una declaración firmada por Novelia Amaro y su familia.
“¡Esto no fue un accidente, fue una tragedia anunciada y una negligencia del Estado!”, agrega el comunicado, que exige verdad y justicia para Maximiliana, calificándola como “guardiana de saberes del pueblo aymara”.
La comunidad aymara de la Quebrada de Quipisca también expresó su pesar y envió condolencias a la familia: “Pedimos a nuestros ancestros que la reciban en su nueva vida y ayuden a sus seres queridos a encontrar consuelo ante tan irreparable pérdida”.
La PDI continúa con las diligencias para establecer la dinámica del crimen y dar con los responsables del hecho.