El oficialismo salvadoreño tomó este sábado las riendas de la Asamblea Legislativa y su primera acción fue votar para destituir a los magistrados de la Sala de lo Constitucional del Supremo y al fiscal general, Raúl Melara.
A los jueces de la Corte Suprema se los acusó de fraude a la Constitución y violar la separación de los poderes, sometiendo la destitución a votación con dispensa de trámite. Mientras que la destitución del fiscal general, Raúl Melara, se produjo por un supuesto vínculo con la Alianza Republicana Nacionalista (Arena), fuerza política opositora al presidente Nayib Bukele.
Melara asumió como fiscal general en enero de 2019 para un período de tres años, con la opción de buscar la reelección. El letrado negó, al iniciar su gestión, tener dichos vínculos con Arena y aseguró que solo era amigo de un excandidato a la Presidencia. “No tengo ninguna vinculación ni de tipo material ni de tipo formal con ningún partido político” y “niego que haya existido una donación directa a Arena”, señaló ante la publicación de fotografías con el entonces aspirante presidencial por Arena, Carlos Calleja.
Tras la destitución, el partido NI propuso a Rodolfo Delgado para ocupar el cargo, quien fue en el pasado asesor de la Fiscalía en la gestión de exfiscal Douglas Meléndez.
En el último año, el presidente Nayib Bukele tuvo enfrentamientos en más de una ocasión con estos funcionarios por decisiones judiciales e investigaciones del Ministerio Público. Ante las reacciones de representantes de gobiernos de otros países, Bukele señaló en Twitter que “estamos limpiando la casa”. Esto luego que Estados Unidos señalara que supedita su colaboración con El Salvador siempre que en ese país se apoye la separación de poderes y sostenga las normas democráticas, de acuerdo con lo señalado por la subsecretaria interina para Asuntos del hemisferio occidental, Julie Chung.
Bukele, que está particularmente activo en Twitter, publicó un mensaje para “tranquilizar” a la comunidad internacional. “A nuestros amigos de la comunidad internacional: Queremos trabajar con ustedes, comerciar, viajar, conocernos y ayudar en lo que podamos. Nuestras puertas están más abiertas que nunca. Pero con todo respeto: Estamos limpiando nuestra casa” y “eso no es de su incumbencia”, publicó el mandatario.
La polémica decisión del nuevo Legislativo salvadoreño se proclamó con 64 votos de los 84 que componen la Asamblea Legislativa los que votaron por la destitución de los magistrados y del Fiscal, que fueron electos por anteriores legislaturas.
Los votos fueron dados por los partidos oficialistas Nuevas Ideas (NI), Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), Partido Demócrata Cristiano (PDC) y Partido de Concertación Nacional (PCN).
Con las recientes medidas aprobadas por el Legislativo, estaríamos frente a un golpe de Estado técnico y a una ruptura del orden constitucional que busca la concentración del poder en manos del presidente Bukele, según lo ha indicado Eduardo Escobar, director de la organización Acción Ciudadana.
El Salvador: Asamblea Legislativa depone a jueces de la Corte Suprema y al fiscal general
Las destituciones de los miembros del poder judicial generan alarma por la concentración de poder que estaría ejerciendo el presidente Nayib Bukele.