Los familiares y la defensa de los líderes opositores nicaragüenses encarcelados Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro denunciaron este miércoles que ambos han sido sometidos a “torturas psicológicas” en prisión, donde se encuentran recluidos desde junio pasado por supuesta traición a la patria.
En una denuncia pública, los familiares de Maradiaga y Chamorro, así como el abogado estadounidense Jared Genser, defensor de los dirigentes opositores, señalaron entre las presuntas torturas luces encendidas 24 horas, confinamiento solitario, interrogatorios diarios y audiencia judicial en la cárcel en secreto y sin sus abogados.
La semana pasada, ambos dirigentes fueron acusados por el Ministerio Público, junto a otras seis personas, del presunto delito de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional.
Antes de su arresto, en junio pasado, Maradiaga y Chamorro habían anunciado sus intenciones de aspirar a la Presidencia de Nicaragua en las elecciones generales del 7 de noviembre próximo.
Primera visita
Según la denuncia, el martes ambos dirigentes “fueron vistos por primera vez desde que fueron desaparecidos por el régimen de (Daniel) Ortega el 8 de junio de 2021” y se les permitió una visita de 20 a 30 minutos a un familiar en la cárcel conocida como El Chipote, donde funciona la Dirección de Auxilio Judicial de la Policía Nacional, al sur de Managua, donde se encuentran detenidos.
“Ambos hombres han bajado entre 20 y 25 libras (9 a 11 kilos)”, según la denuncia, suscrita por Berta Valle y Victoria Cárdenas, esposas de Maradiaga y Chamorro, respectivamente, así como por el abogado estadounidense.
En el caso de Chamorro, según el escrito, “si bien dice que no ha sido golpeado ni maltratado físicamente, ha sufrido tortura psicológica”.
Intensos interrogatorios y luces encendidas
“Por ejemplo, las luces brillantes de su celda permanecen encendidas las 24 horas del día. Y ha sido sometido a intensos interrogatorios diarios que normalmente han durado al menos una hora”, afirmaron.
En el caso de Maradiaga “también dijo que no ha sido golpeado ni torturado físicamente”, pero que sí “ha sido torturado psicológicamente y ha sido sometido a frecuentes y duros interrogatorios”, agregaron.
Asimismo, según sus familiares, durante el primer mes “de su desaparición, estuvo recluido en confinamiento solitario”.
Por otro lado, las esposas de los dirigentes opositores exigieron al “Gobierno de Nicaragua que cumpla con todas sus obligaciones bajo el derecho nacional e internacional”, incluida la celebración de una audiencia pública y abierta, asistido por sus abogados defensores quienes previamente deben tener acceso al expediente judicial y a sus clientes, lo que hasta ahora, según afirmaron, ha sido negado.
En los últimos nueve días, la Fiscalía de Nicaragua ha acusado a 27 dirigentes políticos opositores y profesionales independientes de los presuntos delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional o lavado de dinero.
Entre los acusados se encuentran Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y Miguel Mora, que antes de ser arrestados en junio pasado habían anunciado sus intenciones de aspirar a la Presidencia.
En esos comicios, el presidente Daniel Ortega, que retornó al poder en 2007 tras coordinar una Junta de Gobierno de 1979 a 1984 y presidir por primera vez el país de 1985 a 1990, busca su quinto mandato, cuarto de forma consecutiva, y segundo con su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Denuncian “torturas psicológicas” a dos opositores en Nicaragua
Los familiares de dos de los aspirantes presidenciales apresados por el régimen de Daniel Ortega, denunciaron aislamiento, luces encendidas 24 horas, interrogatorios diarios y audiencias secretas sin abogados.